A la hora de pensar en carreras universitarias que realmente tengan salida en el mercado laboral, no cabe duda de que la ingeniería industrial es una de las más interesantes. Sin embargo, no todo el mundo tiene claro en qué consiste exactamente el trabajo de un ingeniero industrial.

Pues bien, haciendo una definición de tipo técnico, se puede resumir que un ingeniero industrial es aquella persona que controla, opera y optimiza procesos dentro de cualquier empresa o pyme.

¿Qué hay que hacer para trabajar como ingeniero industrial?

Para poder ejercer esta profesión, es necesario conseguir el título universitario correspondiente. De forma posterior y opcional, si bien es cierto que es muy aconsejable, este profesional podrá ampliar sus conocimientos a través de un máster. Por ejemplo puede realizar un postgrado en seguridad industrial. Es muy importante que estas personas se formen en normas de seguridad industrial.

¿Cuáles son las materias que estudiarás en ingeniería industrial?

Pero volviendo a la formación básica del ingeniero industrial, de entrada este tendrá que tener una serie de conocimientos y aptitudes relacionadas con diversas disciplinas. Un papel fundamental en esta carrera lo juegan las matemáticas, si bien es cierto que también aparecen en estos estudios otras muchas ramas de conocimiento.

Entre estas, cabe destacar la física, mecánica racional, mecánica de sólidos, mecánica de fluidos, termodinámica, operativa, administración de personal, logística, canalizaciones, calidad industrial, normativa industrial, y otras muchas.

La formación de este profesional dice mucho de su labor posterior

Tan solo mencionando las anteriores, y teniendo en cuenta que son solo una parte de las que se podría destacar, basta para hacerse una idea de lo amplio de esta carrera, capaz de abarcar desde temas sencillos hasta otros realmente complejos.

Todo lo cual sirve para generar una conciencia y una capacidad de análisis que dé la posibilidad de solventar cualquier problema que pueda surgir en la empresa. Se trata pues de tener la capacidad de crear propuestas basadas en buscar nuevos horizontes, sean lanzar nuevos productos, exportar otros o bien explorar riesgos con grandes beneficios.

El ingeniero industrial se convierte a su vez en administrador de los principales recursos de la organización, que son el tiempo y el dinero. De modo que el análisis del estudio de tiempos, la estandarización y estrategias como el método SMED (que consiste en reducir el tiempo a valores de una cifra) adquieren una importancia vital en una organización, dado que permiten reducir los tiempos improductivos, aumentando de esta manera la productividad.

¿Por qué deberías decantarte por esta carrera?

Aquellas personas que se sientan atraídas por el control de procesos, tienen en la ingeniería industrial su mejor opción. Esta abarca grandes espacios de conocimientos, que permiten tener una perspectiva más amplia desde diferentes puntos de vista, y una capacidad de análisis rápida y creativa (hay que recordar que la palabra “ingeniería” proviene de “ingenio”).

Para dar un valor añadido a un campo laboral que es especialmente amplio, cabe hacer mención a algunas de las opciones que hacen tan interesante decantarse por la ingeniería industrial. Estas serían la posibilidad de trabajar en: entidades bancarias (como analista de procesos, desarrollador de nuevos productos o gerente); industrias de alimentos (en este caso como analistas de calidad supervisores de producción, gerente de asuntos industriales, etc.) o en la industria textil, farmacéutica, petroleoquímica, y un largo etcétera de posibilidades.