El enemigo en casa

El enemigo en casa
Vuelvo a traer a estas páginas las palabras de Churchill el día que se  sentó a su lado un joven Diputado de su Partido en la Cámara inglesa. Cuando el joven le dijo:”Me siento orgulloso de compartir con usted estos escaños frente a nuestros enemigos”. Churchill le contestó: “No te equivoques joven, los de enfrente son nuestros adversarios, los enemigos están aquí en nuestros escaños”. Y esta frase se repite una y otra vez. En este caso es el de Manuel Melero, Portavoz andalucista en el Ayuntamiento de San Roque al que sin ningún estilo, su propio partido lo ha defenestrado de su portavocía públicamente en un intento, no ya sólo de destituirlo  sino también de humillarlo. Nunca el Partido Andalucista ha tenido más presencia en la vida municipal de San Roque que con Manolo Melero que ha ido multiplicando los votos en cada una de las elecciones municipales a las que se ha presentado. No se ni me interesan los problemas internos que haya podido tener el comité local de PA de San Roque con Melero, pero, como acabo de decir, esos problemas habrían de ser internos y no destituyendo públicamente y humillando a este Concejal al que le digo que el comité local de un partido no es nadie para destituir a un portavoz. En un Ayuntamiento ha de ser el Grupo Municipal quien dirija un escrito al Alcalde en este sentido y con la firma de los miembros de ese grupo municipal, por lo que el hecho de que el comité local del Partido Andalucista haya enviado un escrito al Alcalde no tiene ninguna validez. Esta es, desgraciadamente, la historia del PA y sus actuaciones, lejos de llevarlas a cabo de forma discreta, las hace humillando a gente como Manolo Melero que quiero recordarles a ustedes que fue la persona que destapó para España el caso Odissey que ha supuesto después un montón de millones en oro que se les ha devuelto a España. Nadie en esta comarca se ha acordado después de Melero y todo el mundo se ha apuntado al carro. Lo dicho amigo, el enemigo en casa. Pero el futuro lo tienes tú.

El enemigo en casa