ALGECIRAS. - El escándalo de Fitonovo, destapado por la titular del juzgado de instrucción nº 6 de Sevilla, Mercedes Alaya, y que se enmarca en la compleja Operación Madeja, salta a la actualidad local con la propuesta de Izquierda Unida de poner en marcha una comisión de investigación sobre este caso que se produjo, precisamente, con Izquierda Unida en el gobierno local. De hecho, los dos ex acaldes socialistas, Tomas Herrera y Diego Sánchez Rull, imputados por esta causa, fueron socios de gobierno de Izquierda Unida cuando se produjo la concesión, posiblemente fraudulenta, del complejo deportivo El Calvario. Tras muchos meses de silencio, Izquierda Unida saca de nuevo este asunto a la actualidad política coincidiendo con el periodo electoral, a pesar de ser un caso judicializado, y sobre el que según la formación, el actual equipo de gobierno no ha querido investigar. Cabe recordar que fue precisamente este gobierno local, el que puso a disposición del juzgado, toda la documentación relativa al proceso de adjudicación, que se realizó por completo con Inmaculada Nieto como primera teniente alcalde, y con Julio Martínez Fírvida como delegado de deportes. En este sentido, desde IU consideran necesario que se realice una investigación sobre las responsabilidades políticas que se puedan esconder y que pueda elaborar propuestas de actuación para evitar su repetición futura en el seno de la institución municipal algecireña.

Corrupción en el PSOE

Prevaricación, cohecho, malversación de fondos y asociación ilícita son los cargos que la juez Mercedes Alaya, titular del juzgado de instrucción numero 6 de Sevilla que investiga el supuestocobro de comisiones por parte de funcionarios del Ayuntamiento de Algeciras, y dirigentes del PSOE local, ha imputado al ex alcalde Diego Sánchez Rull. La juez Mercedes Alaya, en el sumario de este caso, cuya apertura tuvo lugar en diciembre pasado, tiene fundadas sospechas de la implicación de Diego Sánchez Rull en esta trama, asegurando en su informe que el citado intervino activamente en el desarrollo fraudulento de la mesa de contratación para la concesión y gestión del complejo deportivo y aparcamiento de El Calvario. Según explicaba el diario Europa Sur en su edición del 4 de diciembre, para la lograr la concesión o adjudicación del contrato, la empresa Fitonovo prometió el pago de comisiones al partido en el gobierno en el Ayuntamiento, que en aquel momento era el PSOE junto a IU, aunque especifica también que dicho pago se haría al alcalde (Tomas Herrera) o al delegado de Urbanismo (Diego Sánchez Rull).