La acción, desarrollada en la calle Ancha, en la esquina con San Antonio, ha llamado la atención de centenares de personas que se han parado en sus quehaceres y paseos, han atendido la representación y han captado su mensaje. 

No soy yo, título del montaje, lo han puesto en escena cinco mujeres que, mediante el baile, la expresión corporal y la palabra han representado el ciclo de la violencia que sufren las mujeres víctima de la violencia que las somete, humilla y convierte sus vidas en una cárcel sin paredes donde reinan la soledad, el miedo y el peligro por la propia vida y la de los hijos e hijas. Las mujeres han bailado en la calle Ancha simulando la felicidad del comienzo de una relación, luego han caído en las jaulas de la vida en común con una pareja tóxica y, al fin, han logrado liberarse para gritar, en castellano y árabe, mensajes sencillos pero contundentes: ¡Aquí, estoy dando pasos adelante! ¡Aquí estamos hablando en voz alta! ¡Sé una mujer libre! ¡Y que no te ahoguen con palabras que no vale nada! 

Las protagonistas del montaje trabajan o colaboran con Prointegra, un proyecto de la fundación sobre Prevención y protección de mujeres migrantes víctimas o potenciales víctimas de violencia de género, y sus hijos e hijas. Este proyecto está financiado por el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones y de la Unión Europea a través del Fondo de Asilo, Migración e Integración. Márgenes y Vínculos trabaja especialmente por el bienestar de las mujeres migrantes porque considera que ellas se enfrentan a dos problemas: Sufren las dificultades que implica ser mujer y padecen como migrantes las consecuencias propias de toda persona que abandona su tierra y se va a otra extraña.  

Francisco Mena de Mira, presidente de la fundación, ha pronunciado unas palabras antes de la representación. Mena h afirmado que el mal de la violencia de género existe y es mucho más frecuente y dañino de lo que podamos imaginar. “Combatirlo y ayudar a las mujeres que lo padecen es el deber de todos y todas”, afirmó el presidente de la fundación y añadió: “Los ciudadanos y ciudadanas de Algeciras y del Campo de Gibraltar también debemos ayudar, solidarizarnos y colaborar en lo que podamos para erradicar esta lacra”. Francisco Mena recordó a María Isabel Martínez M., mujer de 37 años y tres hijos, que fue asesinada a puñaladas por su pareja en San Roque a principios de este mes. El presidente de la fundación insistió en que toda la sociedad debe concienciarse y actuar para que crímenes tan atroces no vuelvan a repetirse. 

La delegada del Gobierno andaluz en el Campo de Gibraltar, Eva Pajares, y la concejala de Igualdad y Bienestar Social en el Ayuntamiento de Algeciras, Paula Conesa, han asistido al acto y han apoyado con breves palabras las idea de que todos los esfuerzos son necesarios para acabar con la violencia machista. 

Márgenes y Vínculos agradece la atención mostrada al acto a todas las personas que han dedicado quince minutos de su tiempo a ver y reflexionar sobre la violencia de género. La fundación agradece también la presencia de autoridades municipales y de personas de otras asociaciones que trabajan en favor de los derechos de la mujer y de otros colectivos sociales.