Mercadillo ilegal en la calle Teniente Riera
Mercadillo ilegal en la calle Teniente Riera

ALGECIRAS

El mercadillo ilegal de Teniente Riera una pesadilla que no cesa

El mercadillo ilegal de Teniente Riera una pesadilla que no cesa

Siguen las quejas por el mercadillo ilegal que cada noche se instala en la calle Teniente Riera, que aparece y desaparece en minutos con la presencia policial

No hay manera de erradicar el molesto, barriobajero e ilegal mercadillo que cada noche se instala en la calle Teniente Riera, y que trae de cabeza a lo vecinos de la zona, además de ofrecer una lastimosa imagen de una zona, la del Barrio de la Caridad, a la que se está dedicando un gran esfuerzo por revitalizar.

Las quejas continúan, y es que la presencia policial, cada vez más insistente, lo único que consigue es que los vendedores desaparezcan con su mercancía en los portales cercanos o calles aledañas, para volver a instalarse minutos después de que los agentes se hayan ido de la zona.

En julio del pasado año, el alcalde informaba de las actuaciones que se estaban llevando a cabo en la zona, pero parece que no son lo suficientemente efectivas si bien algunos vecinos apuntan a que este mercadillo ilegal cada vez tiene menos vendedores y compradores.

El alcalde, José Ignacio Landaluce, anunciaba el pasado año que se iba a “acompasar la futura reordenación y revitalización de la Acera de La Marina y su entorno, con intervenciones que permitan erradicar estas prácticas”. La esperada reordenación comienza en breve.

En el último año, la Policía Local ha realizado múltiples actuaciones en la zona levantando actas de denuncia tras la identificación de las personas que allí se instalan. Las denuncias tienen que ver con la venta ambulante sin autorización, actas de intervención de mercancía, incautación de mercancía abandonada, e incluso actas por realización de botellón, tenencia y consumo de estupefacientes, así como otras incidencias como faltas de respeto a la autoridad o la presencia de menores.

El mercadillo ilegal de Teniente Riera una pesadilla que no cesa