Se trata de cinco unidades radiopatrulla, de la marca KIA, equipadas con la última tecnología policial, además de un vehículo camuflado KIA Sportage. Todos son híbridos no enchufables, suministrados por la empresa Transtel y adaptados en Córdoba por la firma Condisa.

Las nuevas unidades llegan bajo el regimen de renting con una duración de cuatro años, tiempo en el que la empresa proveedora se hace cargo de todos los gastos derivados del mantenimiento de los vehículos.

En el caso de los patrulleros, son coches automáticos y cada uno de ellos viene equipado, además, con un desfibrilador que permitirá a los agentes que compongan su dotación intervenir en emergencias sanitarias.

El primer edil ha indicado que estas nuevas incorporaciones “vienen a ratificar el compromiso de este equipo de Gobierno por mejorar no solo los medios tècnicos de la Policía Local, sino también en incrementar la plantilla, caso de las 35 nuevas plazas que hemos convocado”.