El martes se produjo una nueva agresión con arma de fuego en la barriada del Saladillo, es la segunda en menos de un mes, aunque las causas y las formas disten mucho, incluso las armas utilizadas. En este suceso fue detenido un joven de unos 20 años de origen marroquí, que no era el agresor sino un amigo. Este joven fue usuario de los Servicios Sociales del Ayuntamiento de Algeciras en los años que funcionaba en las barriadas del Saladillo y la Piñera, el Equipo de Calle, el LEAJ. Llamemos al chaval Omar. Omar era un niño de apenas 10 años, en situación de exclusión social, con una problemática familiar importante. Los educadores y monitores, ayudados por las trabajadoras sociales de la zona, atendían al niño en las actividades deportivas que practicaba, en los talleres, en las aulas de educación, en las acampadas y en las excursiones. El “morito” como cariñosamente lo llamaban, disfrutaba de esa actividad que lo tenía alejado, como a cientos de niños, de los problemas de la calle. Su padre, ya fallecido, era un buen hombre, que se sentía feliz de ver cómo había gente que ayudaba a su hijo a salir adelante. Eso era un trabajo de educación social, de prevención de conductas, de integración, de dinamismo en un barrio, marcado como ahora, por los graves problemas socio económicos. Esa atención que se tenía con Omar, se tenía con más de 600 jóvenes de entre 3 y 16 años, más un grupo de 20 monitores de entre 17 y 30 años. Cuando este martes llegué con mi cámara al hombro al lugar del tiroteo, muchos fueron los niños de entonces, hoy ya hombres hechos y derechos, los que me advertían: “Han cogido a Omar, pero él no tiene nada que ver”. Me contaban con pelos y señales lo ocurrido, recordaban los viejos tiempos, incluso agradecían lo que en su momento se hizo por ellos. Hoy sale el PSOE y pide “revisar las políticas de atención a situaciones de riesgos de exclusión”. No culpo a Miguel Alberto de esta impresentable forma de oportunismo barato, tal vez el ni lo sepa, o tal vez sí, pero se lo recuerdo. Su partido Sr. Díaz, el PSOE, eliminó en 2004 el Equipo de Calle de la Delegación de Asuntos Sociales del Ayuntamiento de Algeciras, dejando desatendidos a más de 600 niños y jóvenes, incluida sus familias. Su partido Sr. Diaz, lo hizo con el argumento de que Asuntos Sociales no era un Patronato de Deportes. Omar era uno de esos niños que se quedó sin nada. Gracias a su partido y a la concejala responsable de la eliminación de este recurso barato, una tal Isabel Beneroso, nunca sabremos si Omar se hubiese metido en “movidas chungas” o hubiese tomado otro camino. Una cosa le digo, Omar era un buen jugador, un central alto y potente, y con buen trato del balón. ¿Le gusta el futbol? Pues mire, Juan Llaves (Algeciras CF), Miguelito (Cordoba B), Samuel (Algeciras CF), Tomas (Cádiz CF), Maqui (Algeciras B), fueron jugadores del LEAJ, y hoy se ganan la vida con el futbol. Otros siguen de monitores o entrenadores, alejados de “la calle”. Muchos se salvaron  través de otros derroteros, otros no. No dé lecciones de algo en lo que su propio partido jamás ha creído. A lo mejor la culpa de que las cosas en Saladillo y Piñera no estén mejor, la tienen ustedes. Por desgracia, nunca lo sabremos, aunque le aseguro que de haber seguido con nuestra labor allí, las cosas hoy serían muy distintas para todos. Piense en Omar y en Isabel Beneroso, y piense de qué lado está usted. Yo lo tengo claro.