ALGECIRAS. - Cinco victorias consecutivas, tres en una semana, cuatro partidos sin encajar un gol. Cifras que a cualquier equipo, en cualquier categoría, le servirían casi para hacer una fiesta. Desgraciadamente, aunque servidor diría afortunadamente, el Algeciras C.F, no es un club más en esta larga y tortuosa Tercera División. Nuestra barra se abre, con Estrella Galicia por supuesto, para mostrar alegría por esta racha pero, como dice Melchor "sabemos lo que tenemos que hacer y los nuevos también son conscientes de que este club debe volver a Segunda B". Es la condena de ganar, ganar y volver a ganar, que diría el inolvidable Luis Aragonés. Me atrevo a escribir ya, ojalá se cumpla, que Mere, especialmente él, y su gente "van a sufrir un ascenso" más que disfrutarlo, pero creo que el míster, que sigue exigiendo al máximo, ya lo sabía antes de venir. En rueda de prensa se le cuestionó, por este medio, si la ovación del descanso, enorme, fue el inicio de la temporada. El momento en el que la sabia afición Centenaria, que acudió ya en más número, enterró, definitivamente, el traumático descenso. "Queremos gente que venga a aportar, cada día se acerca gente al club con mensajes positivos, esos son los que queremos", apuntó un entrenador que sigue fiel a su idea, aunque con cierta flexibilidad, y que hace juegos de magia para intentar, no es fácil, contentar a todos. "Hay jugadores que se quedan fuera de la convocatoria y es casi injusto", asevera. Esa es una de las muchas variables que tiene que saber manejar el cuerpo técnico. Como contentar a todos, sin caer en errores de autocomplacencia y al mismo tiempo sin bajar la competitividad de un grupo que sólo tiene una meta. El problema, esto va para todos y sin ánimo de dar lecciones -nada más lejos de la realidad- es que hasta mayo o junio queda mucho y el calendario no se puede acelerar. Habrá momentos malos, llegarán derrotas, aunque lo que sí parece claro es que el Algeciras ha evitado, siempre es importante, caer en la zozobra, y no era complicado hacerlo, tras el enorme varapalo. "Lo del año pasado ya está enterrado" aseguró Melchor que lo vivió en primera persona. Ahora llega el Sevilla Atlético, toca ganar y será cumplir con la obligación, es la condena de vestir este escudo en Tercera, claro que muchos se cambiarían por ellos. De momento, nos alegramos y brindamos con Estrella Galicia y agradeciendo el seguimiento semanal, que no pare la racha. Objetivo a corto plazo, aunque hay que ir semana a semana, otra de tópicos, jugarse el liderato en el Mirador en unas jornadas, con la visita del Ceuta. ¿Saben lo que debe hacer el equipo hasta entonces? Sí, ganar.