Ocho partidos, 24 puntos y un casi imposible. Ese es el escenario en el que un deprimido Algeciras afronta, en solitario y sin reproches posibles a su gente, el tramo final de la competición. Todo ello, además, con la enorme losa que supone saber que, si aún queda una mínima posibilidad, pasa por no ceder ni siquiera un empate.

La semana, como admite el criticado Fajardo ha sido dura, aunque si algo ha mostrado el técnico desde su llegada ha sido cierta habilidad en el ámbito mental. Tomó las riendas de un equipo en caída libre y poco a poco lo fue recuperando. Ahora, con dos mazazos casi de KO, debe mostrar que es posible cambiar el ánimo de su tropa.

El algecirismo ya ha recibido numerosos palos a lo largo de su historia y ni comentar los de los últimos años. Pero el del domingo ante el Lucena ha sido de los más dolorosos, sobre todo por la forma en la que se produjo y cuando todo parecía tan cerca. Esa misma gente que se ha desahogado en las redes sociales y que merece todo, es la misma que si el equipo suma un triunfo en Coria, se dan una serie de resultados en los enfrentamientos directos y al final del día la clasificación ha acercado a los suyos, pongamos, a tres puntos de la promoción, no tengan duda los que habitan esa caseta que volverán a empujar como pocas. Claro que está en ellos, en los que se ponen esa sagrada camiseta, prender la llama.

Las matemáticas y también el potencial del equipo, veremos ahora su capacidad de reacción, provocan que aún se mantengan unas mínimas esperanzas. Claro que a partir de ahora los 90 minutos de cada partido se jugarán, más que nunca, sin red. Toca ganar, y volver a ganar y seguir así hasta el final del camino. Lo demás será contar historias que esta sabia afición no va a tolerar.

En lo meramente deportivo, la situación tampoco es sencilla para un duelo en el que el rival se juega la vida. Pablo Ganet, sancionado y goleando con su selección, y José Carlos están sancionados. Borja Vicent, el capitán Iván Turrillo y el central Pablo de Castro, ausente ya ante los cordobeses, están entre algodones. Sin Ganet, y si no llegan los dos primeros, lo de la falta de carácter que tanto se le ha criticado al plantel habrá que resolverlo de otra manera. Toca arrimar el hombre y demostrar, en el campo, que a las dos de la tarde quedarán siete finales.

En los de casa, ahora con Zuñiga en el banquillo, el fantasma del descenso está muy presente. El Coria, un clásico y siempre con el Guadalquivir como un escenario añejo y con sabor, está pendiente de un recurso para ganar dos puntos más tras su empate ante el Guadalcacín, y pensando que una victoria ante uno de los ¿gallitos? servirá de revulsivo para lograr la permenancia.

Redondo, Ismael y el algecireño Maristany no serán de la partida en un equipo que en la primera vuelta ganó 0-4 en el Mirador. Entonces ambos contendientes eran distintos, sobre todo el ahora necesitado Algeciras.

Alineaciones probables:

Coria C.F: Isco, Mario, David Feito, Rojas, Jojo, Iván Martín, Dani Romero, Keita, Chapi, Pavón y Gonzalo.

Algeciras C.F: Romero; Dani Gallardo, Cerpa o Borja, Álvaro Benítez, Juanjo, Antoñito, Iván, Pipo, Zafra, Eric y Karim.

Árbitro: Montijano Linde. (Granada)

Estadio y hora: Guadalquivir. 12:00