Un lance del encuentro ante Mijas. // Foto: José Setién.
Un lance del encuentro ante Mijas. // Foto: José Setién.

DOS MINUTOS DE GONZÁLEZ-REBOLO

Reconducir y seguir

Reconducir y seguir

La derrota cosechada por los algecireños la pasada jornada no tiene por qué afectar en la dinámica habitual del equipo. Para ello, hay que tener una buena toma de tierra

ALGECIRAS.- Cuando en un bloque de edificios, la instalación eléctrica data de fechas inmemoriales, nos exponemos a que un mal gesto descalzo o con las manos húmedas cerca de un electrodoméstico pueda causarnos problemas muy graves. Para evitar esta situación, no existe otra alternativa que una toma de tierra, que es la parte del circuito eléctrico de una estructura que impide que la electricidad se propague a un cuerpo.

Los de Chano sucumbieron, sin lugar a dudas, ante el B.M. Mijas, por muchas conjeturas que se quieran hacer jalonadas por el número de bajas o la juventud del quinteto inicial. Además, enterraron la racha de cinco victorias consecutivas que atesoraban. Muchos disgustos juntos que podrían propagarse por los cuerpos del conjunto algecireño hasta dañarlos en demasía. Todos estos aspectos negativos deberían conducirse hacia una buena toma de

No se estuvo a la altura del rival. Unos muy voluntariosos Domingo Luis y Juan Marcos no sirvieron para aplacar al cuadro costasoleño. El lateral zurdo es una de las joyas del balonmano algecireño y, por extensión, del andaluz. En el senior, ha encontrado un sitio que le aporta muchas ventajas con respecto a su situación en el juvenil. Para el equipo de Luis Cazorla, Domingo Luis es su referencia. Todos los balones pasan por sus manos y cuenta con una desmedida responsabilidad, la cual contrasta con la discreción que atesora en el lateral derecho del conjunto de Chano y que lo hace mucho más bueno. 

La derrota y los aspectos negativos deberían ir a parar a la toma de tierra, para sí no dañar al equipo

De Juan Marcos, ¿qué decir? Fue el salvador del equipo algecireño, puesto que, de no haber estado en Mijas en la matinal del domingo, las cosas hubieran adquirido un cariz peor ya que Chicón no cuajó la mejor de sus actuaciones. Por otra parte, en labores ofensivas, pese a la derrota, se vieron aspectos positivos. Juan Bermejo se erigió aún más líder del ataque y Pedro Saucedo continuó con sus buenas actuaciones, a las que le falta, en ocasiones, la madurez que solamente le aportará la experiencia. La misma que hace que Juan Manuel Cruz coseche buenos encuentros cada jornada. En lo que a Saucedo concierne, tiempo al tiempo. 

La escuadra malagueña se hizo muy pronto con la batuta del encuentro y no dejó probar bocado del pastel a los de Chano. Ni una pizca. La ambición y la intensidad en su juego, unidas a la calidad de algunos de sus jugadores como Mikri o Tato, propiciaron que el Colomer no pudiera toserle a los mijeños. Por ello, el partido cosechado por los malacitanos otorga aún más mérito al mando de colíder que ostentan los algecireños. En una liga tan pareja como esta, en la que el último te ata las manos en su pista, va a ser muy difícil desmarcarse.

Los de Chano están abocados a seguir el ritmo marcado jornada tras jornada, aunque esta sea la excepción que confirma la regla. Los algecireños son humanos y, a buen seguro, no será el último partido que pierdan esta temporada. Lo más importante es saber reconducir esa energía negativa que siempre circula por las instalaciones tras una derrota y confinarla a la toma de tierra que todo edificio puntero que se precie debe tener. El Colomer es un edificio puntero, pero, ¿tendrá buena toma de tierra? El próximo domingo, sin tener que contratar a ningún profesional, saldrá a las claras.

 

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