Opinión

Una liga para disfrutar y sufrir

Una liga para disfrutar y sufrir
En Tarragona no se rompió la mala racha de visitante. FOTO: Blas
En Tarragona no se rompió la mala racha de visitante. FOTO: Blas
El Algeciras, como casi todos los equipos de Primera RFEF Footters puede pensar en el play-off o caer al descenso. La tranquilidad y la paciencia pueden ser claves en la recta final del campeonato para lograr el objetivo de la permanencia.

Nueva derrota, van seis seguidas, del Algeciras en la carretera. La Resaca de hoy pretende, no sólo plantear debates respetuosos y aportar su humilde granito de arena, sino también hacer un análisis algo más profundo de lo que llevamos de competición, antes del tramo final y decisivo.

Del partido ante el Nástic ya está casi todo escrito y dicho. El penalti a Romero es de libro. “Empieza a cansar un poco y parece que tienen que matarlo para que le piten uno”, sentenció Ania. A nadie escapa que el posible gol, los penaltis hay que meterlos que parece que se nos olvida siempre, habría cambiado la dinámica del duelo. Cierto es que luego llega el error de Mariano, el 2-0 que lo anula por compensar y la lección de orgullo de los nuestros que, sin embargo, no sirvió para rascar un punto. Reapareció Tresaco, por fin, Alberto Bueno dejó destellos y el fondo de armario, a la espera de solventar lo del lateral derecho, es fiable.

Sin embargo, más allá de lo ocurrido en el Nou Stadi, otro escenario de Primera para no olvidar que hace nada era impensable estar ahí, la realidad es que, de los 12 últimos partidos, los rojiblancos han ganado cinco y perdido siete. A este equipo se le ha olvidado empatar. En la liga de tres puntos el botín es muy apetecible y los de Ania tienen una composición de plantilla que les hace ser osados, tanto de local como de visitante.

En el entorno hay opiniones, todas respetables, que pidan ser más rocosos y menos valientes, pero cuando tienes tanta pólvora arriba, es difícil renunciar. Además, a buen seguro que esos mismos, se mostrarían críticos si el equipo se cerrase más. Fútbol.

Pero hay un detalle, esto va para nuestra gente y sin ánimo de nada como siempre escribo que uno aquí no es más una gota en el océano, que no debería pasar por alto la parroquia que tan bien está respondiendo y convirtiendo en un fortín el Mirador. La liga, ya van 23 jornadas, da para soñar y sufrir cada siete días. Es lo que tiene el fútbol profesional, en el que todos compiten puesto que hay demasiado en juego.

San Fernando gana en Castellón o Barcelona, pierde en casa con el Andorra. El Algeciras gana en Sevilla, Linares o La Línea, ahora ni siquiera puntúa lejos de su templo. El Alcoyano, próximo visitante de La Menacha, estaba en mitad de la tabla y en mala dinámica, gana en Murcia y a un Sevilla lanzado y ahora sueña con el play-off. Están los partidos pendientes que propician una tabla clasificatoria menos real de lo que puede ser, y así un sinfín de ejemplos.

Paciencia y unión

La conclusión, se admiten discrepancias y se agradece el seguimiento, es que la paciencia puede ser la clave. Estamos ante una competición muy parecida a la Segunda A. No me refiero a la calidad, algo menos evidentemente, pero sí a la competitividad. Es por ello que los ceses de entrenadores ya sobrevuelan muchos clubes, alguno ya ha cambiado, otros piensan que van a ascender tras un triunfo y al siguiente que se van al pozo -esto por cierto es muy nuestro- por perder en casa o fuera. Si sacamos de la ecuación a Villarreal, Andorra y Albacete, que por cierto también tienen que pelear y mucho para sumar, es la tónica que estamos viendo en la maravillosa competición que estamos disfrutando.

Objetivo claro, una vez más lo recordamos: la salvación. Pero es tarea de todos, ni volverse locos por ganar en casa, ni destrozar todo porque se pierde fuera. Cierto es que la dinámica lejos de los muros del Mirador es mala. "No podemos convertir cada partido de local en una final”, espeta Ania. Pero, que sepamos a esta hora y en este día, el equipo de nuestra pasión, sueños y sufrimientos, suma 33 puntos que nadie le va a quitar. Tiene margen de maniobra y además el sábado vuelve a su escenario preferido. No estaría de más que el duelo se tenga marcado en rojo por parte de la afición. El que llega es un rival de los rocosos y aunque no tenga las luces del último que pasó por allí, puede que sea hasta más complejo. Escrito está que aquí nadie regala nada.

Si se gana, como todos deseamos, no se estará en el play off. Si se empata, no se habrá escapado ese sueño y si se pierde, ojalá que no, el equipo seguirá en Primera RFEF Footters. Hasta la jornada 38 van a pasar muchas cosas y quizás con algo de calma y siguiendo en esa perfecta comunión entre grada y equipo, todo sea más fácil. Luego, cada uno puede soñar o sufrir, la salvación está cerca pero aún no conseguida. 

 Y es que para volver a campos innombrables, a pagar más que nadie por ver el equipo fuera y ser el León en una selva vacía, siempre queda tiempo y esperemos que no vuelva nunca. Por eso, pasión, disfrute, sufrimiento y no viene mal algo de templanza...

Posdata: Aludiendo a la paciencia, el partido ante los de la moral, puede requerir de mucha por parte de todos. Siempre Shiraaa...