Opinión

Momentos decisivos para el ACF

Momentos decisivos para el ACF
El domingo llega el megaproyecto del Baleares con dos puntos de ventaja. FOTO. HS
El domingo llega el megaproyecto del Baleares con dos puntos de ventaja. FOTO. HS
El Algeciras encara unas semanas claves tanto en el césped como fuera de él. La transformación del club en SAD está finiquitada y sólo queda desear los mejores éxitos a Sancho. En lo deportivo el sueño es factible sin olvidar que lo primero es la salvación.

Llega la Resaca tras una derrota de los nuestros. La primera en las últimas seis semanas, dato que conviene no olvidar, y con cierto enfado, que ha ido pasando a medida que avanzaba la jornada del domingo, entre el siempre exagerado, para bien y para mal, entorno algecirista.

Para dejar claro el posicionamiento del que suscribe, una gota en el océano rojiblanco, destacaría varias parcelas. La primera y fundamental, la salvación. Esa que sigue estando apalabrada, pero ante la que nos puede el miedo, a mí el primero, de todo lo pasado. La siguiente es que el Recreativo de Huelva, enhorabuena de corazón, acaba de celebrar el ascenso a Segunda RFEF. Ojalá pronto estén donde merecen. Sirva la cita para poner en valor algunas cosas de las que estamos viviendo en el presente. 

La tercera, ya entrando en el partido del sábado, es que el Villarreal B es mejor equipo que el Algeciras. No pasa nada por reconocerlo. Lo peor fue regalar dos goles tras un buen trabajo en el primer acto. Seis minutos, como bien dijo Ania en su comparecencia de prensa, dieron al traste con todo lo hecho anteriormente. Previsiblemente los puntos se hubiesen quedado en la localidad de la cerámica, pero que al menos lo hubiesen peleado más. De hecho, incluso con el 2-0, Romero tuvo el gol que habría cambiado, quizás, el final del choque. Hasta ahí todo perfecto y hasta se pueden entender algunas críticas.

Luego están los análisis globales. Salvo el cuadro amarillo y la llegada del Castilla a puestos de play-off, nadie de los de arriba ganó. Tres semanas sin vencer, dos empates, una derrota, y sin embargo seguimos a un punto del sueño, nunca obligación. Oportunidad perdida, dirán algunos. Puede. También es la demostración de lo maravillosa y puñetera, escrito está, que está siendo la categoría.

En lo deportivo pocas dudas quedan ya que estamos en una competición que se ubica a muchísima distancia de la antigua Segunda B. Esa que, por cierto, tampoco pisamos mucho en los últimos años, conviene seguir siendo ambiciosos, pero no olvidar. 

Quedan ocho finales para, cuanto antes, dejar cerrada la salvación y seguir peleando por el sueño. Si llega bien, y si no tan felices con lo primero.

El domingo duelo ante un rival directo. ¿Quién nos lo iba a decir en agosto? El megaproyecto del Baleares puede ser superado por el Algeciras si la victoria, como deseamos, se queda en casa, cuando sólo restarían siete jornadas para terminar. 

Pongamos las cosas en orden, pidamos, critiquemos, aumentemos la exigencia para crecer, pero no perdamos la perspectiva. De aquí al final, con el riesgo de quedar mal por aquellos de los pronósticos, cada punto va a costar un mundo. Un empate que al terminar un partido puede parecer poco botín, se convierte, por mor de la igualdad existente, al alza, en un tesoro.

Probablemente la paciencia, la presión de los que tienen la obligación y la constancia de los que soñamos, puedan ser argumentos claves para llegar a esa tierra prometida. Si hasta ahora, con honores, la grada ha sido reconocida por toda la categoría, ha llegado el momento de ese último empujón. Entre todos, dicho está desde aquellos años en el barro, es más fácil. El problema es que los rivales, ahora, son muy muy muy pero que muy buenos. Ojo, los nuestros también.

La SAD

En otro orden de cosas llega el momento trascendente de la historia de nuestro amado club. Ese que ya dejará de ser nuestro y que, todo apunta y así lo está demostrando, caerá en unas manos excelentes como las de Félix Sancho. Esperemos que el camino emprendido siga así.

El miércoles (18:30) se celebrará una asamblea en la que 254 socios tendremos la posibilidad de comprar acciones a un precio de 11,000 euros. No parece que nadie pueda adquirir las mismas. Sobre todo, porque en más de 100 años nadie ha aparecido, por desgracia, con los casi cinco millones de euros que, al final de la presente andadura, habrá puesto sobre la mesa el empresario de Burgos. Si este mensaje llega a alguien o vale para algo, el mismo sólo tiene como objetivo  indicar que no mareemos la perdiz y nos perdamos en vericuetos que tanto nos gustan, nos meteremos todos. 

El club, nuestro Algeciras C.F; para bien o para mal, todo apunta a lo positivo, es de Félix Sancho. Para seguir creciendo o para apagar la luz si es que, como algunas veces ha ocurrido, alguien intenta enredar, apurar plazos legales etc... Tienen todo el derecho, estamos en un país libre, pero si somos realistas, prácticos e inteligentes, que el lunes, antes que el martes el club esté ya en sus manos y funcione, de verdad, como su empresa.

La conclusión es que llega la hora de la verdad, en todos los sentidos. En el campo, afortunadamente y tras muchos años de penurias, podemos ilusionarnos. En lo institucional, todo el éxito del mundo para Sancho, el suyo será el de todos los que profesamos esta bendita religión. Siempre Shiraaaa.

PD 1: Enhorabuena a la directiva, veteranos y todos los que participaron en la organización del amistoso ante el Real Madrid. El crecimiento social también es evidente. 

PD 2: Al que competa. Sigue siendo increíble que si en el Mirador juega el primer equipo o hay un acto social y deportivo como el del domingo, las categorías inferiores del ACF disputen partidos en La Menacha.