Opinión

Uno de esos momentos

Uno de esos momentos
La grada sigue siendo fundamental para el equipo. FOTO: D. Fuillerat
La grada sigue siendo fundamental para el equipo. FOTO: D. Fuillerat
El Algeciras perdió en Baleares ante un equipo que es mejor. El proyecto de Sancho, muy ambicioso, no acaba este año. La afición sigue siendo el mejor valor del club y el miércoles, seguro, lo volverá a demostrar.

El Algeciras cayó en Baleares en el primero de los tres partidos que afronta esta semana (el de Andorra se jugará el sábado a las 18:00 horas). Esta resaca llega casi sin respiro y pensando ya en la cita del miércoles, en el santuario, ante el Cornellá. El único equipo que, por ahora, ha desarbolado a los de Ania en la presente temporada. 

Ante los catalanes arranca una segunda vuelta que será aún más apasionante y dura que la primera. El triunfo, por tanto, se hace indispensable por varios motivos: El primero es evidente, alcanzar los 30 puntos con 18 partidos pendientes. El segundo, para seguir fuertes al amparo de esa grada que está de 10 y el tercero, para dejar claro que el objetivo principal, sí con perdón de los que no lo entienden así, la salvación, llegue cuanto antes. Sin prisas, pero sin pausa.

La cita de Mallorca, viendo redes y escuchando a la calle, deja una sensación que, al menos aquí, compartimos, pero sólo a medias.  Cada uno, con respeto, es libre de opinar lo que guste. Perder ante el potente equipo balearico, pese a las bajas que tenía, entraba dentro de lo normal. Sabemos que en el fútbol no hay lógica, pero eso no ocurre siempre. Es la misma situación que se puede dar el sábado en Andorra.

Los hay que piden a Ania ser más conservador, muchos de esos también critican que el equipo es demasiado blando. ¿En qué quedamos? Como siempre con el respeto a todos, sería cuestión de pensar en las armas que tienen los nuestros y las del contrario. 

Todos, cuando arranca el partido, entendemos que los rojiblancos siempre deben ganar. Es fútbol y puede pasar cualquier cosa. No obstante, también hay un componente de realidad, duela o no, y que tiene que ver con el poderío de cada club. Más en una categoría que, ya casi sobre escribirlo, es cinco veces más competitiva y dura que la extinta Segunda B.

El Baleares, más allá de la lesión de Víctor López, el gol tempranero, la buena reacción de los nuestros, el tanto de Romero (van 10) etcc.. ganó, simplemente, porque es mejor. Y eso que acabó casi pidiendo la hora, ahí está el mérito enorme de los nuestros.

Conformismo del que escribe, dirán algunos. Puede ser. Realismo, dirán otros. En cualquier caso, no estaría de más que esa bendita pasión que nos inunda a todos, no impida ser algo más equitativos. Ni cuando se gana hay que renovar a toda la plantilla, ni cuando se pierde cambiar a medio equipo. Esta, como cada semana, es sólo una opinión que no sirve para nada, no está de más recordarlo.

Proyecto ambicioso 

El ambicioso proyecto de Sancho, que no es sólo para este año, la mentalidad ganadora de Ania, siempre va arriba y además no es una pose, debería ir acompañada, al menos por esa afición que sigue siendo maravillosa, de cierta tranquilidad tanto en los momentos buenos como en los que no lo son tanto. El del miércoles si que es, a mi entender, un partido clave. No va a decidir nada, por supuesto, pero es evidente que el de Cornellá, a priori, es uno de los equipos que también están en la pelea por la salvación.

Desde el inicio de temporada, excepción de las primeras jornadas, los algeciristas hemos disfrutado de comodidad en la clasificación. Eso propicia que el equipo disfrute en el campo, se atreva a hacer cosas y la grada siga animando como hasta ahora. Todo ello se debe a la renta de puntos alcanzada y que permite tropiezos sin grandes consecuencias.

Las segundas vueltas, no descubro nada, son más duras. Ahora ya no vale la coletilla de “queda mucho”. Hay demasiado en juego, la categoría no la quiere perder nadie y otros muchos aspiran al ascenso. Cinco bajarán y solo uno subirá como campeón. Esa es la cruda realidad.

Comenzar esta etapa con 30 puntos sería, sin duda, tener un buen trecho recorrido dando por bueno eso de que con 43 puntos no deberían existir problemas. Algo que, viendo la reacción de los de abajo, habrá que ir analizando semana a semana, pero en principio debería bastar.

Es por ello que el choque del miércoles adquiere una importancia mayor. No definitiva, ni mucho menos, pero puede ser uno de esos momentos en los que los nuestros den ese pequeño estirón respecto a la parte de abajo y entonces, nuevamente, permitan que sigamos con el debate de las bajas, las altas o el pensar que todos son peores que los nuestros (ironía). Mejor hacerlos a siete u ocho puntos del descenso

Será que muchos vemos las cosas así después de un calvario que parecía eterno como el que ha pasado el algecirismo.  Y es que no son pocos, me incluyo, los que aún nos pellizcamos para ver que en dos semanas el que comparecerá en el templo será el Barcelona B, por citar un ejemplo.  Será que nos hacemos viejos, o será que no queremos ver al equipo en Segunda A o Primera División. Dónde hay que firmar, pero por favor piano piano..

Posdata: Siempre Shiraaa, el miércoles puede ser uno de esos momentos.