Opinión

Monotonía

Monotonía

La fatal monotonía diaria, el aburrimiento arrastrado, la invariabilidad en el día a día… no  es algo exclusivo en la vida de Juan

Hoy es viernes (he escrito esto y entonces me he dado cuenta de que en realidad es sábado), pero también podría ser cualquier otro día de la semana. Hablo del caso de Juan para quien la monotonía invade su día a día y le es complicado diferenciar unos días de los otros. De lunes a viernes son todos casi iguales y al llegar el fin de semana, entonces el mundo se paraliza y para Juan es como si se quedase en una ubicación donde el reloj tampoco avanza y los minutos y  las horas se hacen interminables. En momentos así es cuando él piensa que realmente está desperdiciando su tiempo y que seguramente existe alguna otra manera de aprovecharlo, aunque a Juan se le escape y no tenga ni idea de cómo hacerlo.

Está harto de revisar sus redes sociales intentando descubrir quizás algo que lo sorprenda, algo que lo aparte de ese insoportable letargo que sufre, pero no sucede nada. Solo ve como otros publican infatigablemente todo aquello que hacen, como si en cada acción llevada a cabo hubiese una gran dosis de entusiasmo y la vida de todos los demás fuese extraordinaria. Pero Juan no termina de creerse tanta felicidad fingida. Más bien piensa que es precisamente esa falta de  algo especial en la vida de sus contactos sociales, lo que los lleva a hacer un desmesurado esfuerzo de intentar aparentar lo que realmente no son.

La fatal monotonía diaria, el aburrimiento arrastrado, la invariabilidad en el día a día… no  es algo exclusivo en la vida de Juan. Es algo extendido más de lo que se cree a causa de una carencia generalizada en la vida de hoy, la magia. Nos falta la magia