Del huracán de noticias cutres, casposas, delictivas y todas deleznables que vamos conociendo cada día de la trama del caso Mediador se pueden sacar múltiples conclusiones. Entre las que se refieren a cuestiones exclusivamente políticas hay una lección que sería ideal –pero no es real ni posible– que hayan aprendido las distintas fuerzas políticas de este país.
Las envidias, los chantajes, lealtades y deslealtades, venganzas, egos y ambiciones en los partidos es algo más común de lo que el ciudadano cree. Y es que, desgraciadamente, todo lo impregna la mediocridad.
Para el algecireño, la Cuaresma es un estado de gracia realmente especial. Paseamos por las calles a la búsqueda de ese pellizco que se nos muestra para mayor gozo de nuestra alma. Bullas en días ordinarios como si fuera un Domingo de Ramos.
He leído en El País como un “ gracioso” nos califica a los andaluces como “Andalucistas de charanga y pandereta”. Por supuesto, lo dice desde Madrid. Como también lo han dicho desde Cataluña.
Mucha digitalización, mucha inteligencia artificial, muchas relaciones 'online' y amigos virtuales, mucha conectividad pero la realidad, la pura realidad de todo es que cada día estamos más solos, nos sentimos más frustrados y no tenemos herramientas para salir de situaciones emocionales de bloqueo.
Sin pena ni gloria. Sin el más mínimo atisbo reivindicativo. A esto y poco más ha quedado reducida la conmemoración del Día de Andalucía. Y este año que hemos salido de la pandemia se aprovecha para que pase totalmente desapercibido.
Esta frase la solía repetir el ministro Pío Cabanillas, pero mucho antes otros dirigentes políticos de todo el mundo ya habían llegado a la misma conclusión, que el peligro real en la política no está en los adversarios políticos sino en los de su mismo partido.
Las jóvenes francesas no pudieron acceder hasta 1879 a la educación secundaria. En España, el derecho a la formación de las niñas se reconoció antes, pero era distinto a la de los niños, y así se mantuvo hasta el siglo XX.
La felicidad de una persona se determina fundamentalmente por la calidad de sus relaciones interpersonales y de sus vínculos afectivos. Por eso preocupa mucho el número de personas que, en las sociedades occidentales, se sienten solas y no tienen el paraguas de la familia, amigos, compañeros, vecinos, parejas o, incluso, ciberamigos.
Ahora que nos preparamos, a cuenta de los carnavales, para recuperar el tradicional «¿me conoces, mascarita?», llega el adiós a las mascarillas. Esas que convivieron con nosotros como mecanismo de protección contra la covid-19.
Por si ya no hubiera demasiados titulares inquietantes, ahora hay un terremoto en Turquía, que es una catástrofe real con miles de muertos, herido y ciudades enteras en la ruina total, y es angustioso solo pensar en las personas vivas atrapadas en montañas de escombros y a las que hay que llegar contra reloj.
La Reunión de Alto Nivel entre España y Marruecos celebrada esta pasada semana en Rabat venía precedida de graves desencuentros, una reconciliación precipitada por el volantazo de Pedro Sánchez en relación al contencioso del Sáhara Occidental, y la división en el Gobierno español entre socialistas y Unidas Podemos sobre cómo encauzar las relaciones con un vecino estratégico cuyos destinos decide de manera unipersonal el rey Mohamed VI.
Hace años que muchos venimos advirtiendo de que la siguiente epidemia a la pandemia del covid iba a ser la salud mental. Y digo epidemia porque ignoro cómo ha afectado todo esto a otros países y continentes.
Hemos vivido y estamos viviendo unos días terribles desde que se produjera el atentado yihadista que se ha llevado la vida de mi amigo Diego Valencia, herido el Padre Antonio de la Parroquia de San Isidro y que ha producido el terror en dos de nuestras Iglesias.
Empezamos la semana con los papeles de Biden.Confidencial pero lo tenemos en casa. Va a resultar que es una tradición en los Estados Unidos que un presidente se lleve información confidencial a su casa.
El 12 de abril del año 2000, el Partido Andalucista firmó un pacto de gobierno con el PSOE de Andalucía. En ese Pacto iba incluído que el Alcalde Algeciras sería el Vicepresidente segundo de la Autoridad Portuaria de la Bahía de Algeciras, siendo el primer Vicepresidente el Subdelegado del Gobierno Andaluz en el Campo de Gibraltar.
Ayer, coincidiendo con el comienzo de la Feria Internacional del Turismo (FITUR), cuarenta y cuatro trenes procedentes de Andalucía estuvieron parados más de cinco horas a consecuencia de un problema de una catenaria debido al mal tiempo.
Digámoslo claro y ahorrémonos la vergüenza de tanta hipócrita . No todos somos iguales porque dependemos del azar de donde nos nacen. Porque no nacemos, sino que nos nacen. Sin que importe nuestra opinión en absoluto, sin que cuente el azaroso lugar de la Tierra en nuestro currículum ansioso de méritos.
La mayoría de los institutos de opinión, a cinco meses de las elecciones municipales y el doble para las generales, certifican (a excepción del CIS) que el Partido Popular va por delante del Partido Socialista en intención de voto.