Opinión

El sincorbatismo

El sincorbatismo

“No llevo corbata. Podemos todos ahorrar desde el punto de vista energético y he pedido a los ministros y funcionarios públicos que cuando no sea necesario, no la usen”. Palabras textuales. Esta es una de las medidas –el resto las anunciará el lunes en el Consejo de Ministros  para ahorrar energía.

Y resume perfectamente la política de Sánchez: vender una cosa y hacer la contraria. Tras la rueda de prensa en Moncloa, en vez del coche oficial, cogió un helicóptero Súper Puma que le trasladó a Torrejón de Ardoz y, allí, se subió al A-310 rumbo a los Balcanes.

Pues bien, el presidente del Gobierno –y los cerebros de Moncloa- han vuelto a poner de moda el “sincorbatismo”(que ya lo puso de moda el ex Ministro Miguel Sebastián) porque Pedro Sánchez y su legión de asesores – 383 solo a su servicio, según el último balance, récord de la democracia y subiendo- miran a Alemania y creen que ser el más ecologista puede venirle bien para intentar darle la vuelta a las encuestas como  ha prometido en su mitin de Moncloa.

A Sánchez le gusta la política de gestos. Esa en la que, cuando se profundiza, muestra las verdaderas vergüenzas. El presidente irá a partir de ahora sin corbata –y obligó ya ayer a todos sus asesores y ministros, con el fiel  Bolaños y Óscar López a la cabeza- a asistir a la rueda de prensa sin la  corbata. Pero seguirá moviéndose en Falcon y en Súper Puma para cualquier trayecto que, si de verdad le preocupara ahorrar energía, podría hacer en ave o en coche: cada hora de Falcon en vuelo consume 1.313 litros de combustible.

La contribución al medio ambiente de toda la parte masculina del Gobierno al quitarse la corbata se dilapida con un despegue del Falcon, que en las últimas semanas  ha llegado a volver de los sitios de vacío para comodidad del presidente. En solo 72 horas, el presidente movilizó 24 horas el avión y el helicóptero presidencial para ir a lugares como León, a menos de dos horas en AVE. A partir de ahora, hará esos trayectos sin corbata, lo que sin duda contribuirá muy mucho a rebajar la huella del carbono de los vuelos del presidente…