Opinión

Ya se han olvidado del radar

Ya se han olvidado del radar

Lo he podido comprobar en estos días en los que he vuelto a ver, fundamentalmente, los camiones que salen del puerto que vuelven a entrar en el túnel de Acceso Norte a una velocidad endiablada

A raíz de la colocación  del radar en el túnel del Acceso Norte a la ciudad y al puerto de Algeciras limitando la velocidad a cuarenta kilómetros por hora, el número de accidentes en el túnel ha bajado de forma espectacular por lo que estaba claro que era el exceso de velocidad el causante de la mayoría de los accidentes que han llegado a causar varios muertos.

Sin embargo, sólo se colocó un radar ubicado a la salida del túnel en dirección al puerto y al centro de nuestra ciudad. Eso ha hecho que una vez que has pasado el radar viniendo del puerto y justo antes de entrar en el túnel, se vuelva a subir la velocidad que se encuentra a unos cincuenta metros antes de entrar en el túnel.

Al no haber un segundo radar a la salida del Acceso Norte en dirección a Málaga, una vez que han entrado en el túnel en dirección a la salida de Algeciras se vuelve a aumentar la velocidad y se olvidan del límite de cuarenta kilómetros por hora.

Lo he podido comprobar en estos días en los que he vuelto a ver, fundamentalmente, los camiones que salen del puerto que vuelven a entrar en el túnel de Acceso Norte a una velocidad endiablada y he podido observar como algunos se ha salido de su propia vía.

Ya se conoce que sólo hay un radar y ya se vuelve a sobrepasar la velocidad pero no en pocos kilómetros por hora sino casi duplicando la velocidad.

Lo que se había conseguido que era respetar el límite de velocidad  ya vuelve a no respetarse.

Nos encontramos en una situación parecida a la que teníamos antes de la colocación del radar.

Y, desgraciadamente, mucho me temo que volveremos a los accidentes si no se toman medidas y se coloca ese segundo radar y al que se coja, multazo que te crió.

En otros lugares, la colocación de radares puede ser con afanes recaudatorios pero en el caso del Acceso Norte, es un caso de salvar vidas. Un segundo radar  y rápido porque, desgraciadamente, no aprendemos.