Unas declaraciones que la dejan en entredicho porque asumió en silencio y punto por punto, la decisión de Sánchez y del resto del Gobierno.

No sabemos si estas declaraciones responden, de alguna manera, a un desmarque de la línea oficial para iniciar un camino diferente tras la ya famosa reunión en Valencia con Ada Colau, Oltra, Hamed y García con un fondo de pantalla que decía OTRAS POLÍTICAS.

Sin embargo, estas palabras de hoy no se corresponden en absoluto con lo que dijo el 8-M y  con las que asumía por completo el argumentarlo oficial del Gobierno: “Seamos cautas. Mando un mensaje de tranquilidad. No está pasando nada”. Estas fueron sus palabras textuales ante el 8-M.

En aquel 5 de marzo de 2020, Yolanda Díaz, a las puertas de la peor pandemia en más de un siglo en España, recetaba tranquilidad y normalidad mientras el Gobierno ocultaba las alarmas.

Ahora, hoy mismo, de manera sorprendente, Díaz intenta no salpicarse de la gestión de esa pandemia que ha llevado a España a tener más de cien mil muertos: “ El 15 de febrero de 2020, como ya la pandemia estaba azotando muy fuerte en Italia, convoqué a mi equipo porque tenía la convicción de que Italia es España y, por tanto, teníamos la necesidad de desplegar un montón de medidas porque veíamos lo que iba a pasar”. Palabras textuales que ha hecho públicas hoy.

La entonces ministra y hoy vicepresidenta segunda del Gobierno reconoce lo delicado del momento en el que el sector socialista del Gobierno rechazó las propuestas de Yolanda Díaz: “El 4 de marzo presenté una guía  que fue enormemente polémica en el Gobierno y también fuera, y se me acusó de ser una alarmista.en fin. Esto fue la antesala del 8-M”.

Esto significa, ni más ni menos, que nos estuvieron mintiendo durante esos días y semanas  previos sabiendo ya perfectamente la gravedad de la situación ante la pandemia. Alguien tendrá que explicarlo a los españoles, incluida la propia Yolanda Díaz que calló conociendo el tema y por cuya causa se nos vino encima y de golpe la pandemia.