Parece ser que hay intenciones de poner en marcha un nuevo proyecto andalucista o al menos es lo que se está difundiendo por las redes sociales.

Me parece fenomenal que se ponga en marcha un proyecto andalucista que defienda sola y exclusivamente los intereses de Andalucía porque ha resultado penoso en estas últimas elecciones generales que no se haya presentado una fuerza exclusivamente andaluza.

Pero quien está dando a conocer este nuevo proyecto que se supone va ser realidad el próximo 28 de febrero, Día de Andalucía y en el que se conmemora la celebración del Referéndum sobre el proceso autonómico de nuestra tierra en el año 1980, es, precisamente, la persona que certificó la defunción del Partido Andalucista, El último secretario general del PA, Antonio Jesús Ruiz, quien se está convirtiendo en el portavoz de este anuncio.

No me parece lo más adecuado. El finiquito del PA lo firmó este señor que, además, pasó a ser funcionario de confianza en la Diputación Provincial de Cádiz, a las órdenes de la Presidenta, la socialista Irene García.

Algeciras siempre ha sido un bastión importante del andalucismo donde hemos gobernado durante tres legislaturas. Los Barrios sigue siendo una ciudad andalucista y muchos compañeros se están partiendo el pecho en pueblos y ciudades de nuestra tierra. Solo en la provincia de Cádiz hay cinco alcaldías andalucistas y muchos concejales que trabajan según su saber y entender sin que les haya asistido de ninguna de las maneras.

Y resulta que nos enteramos de la noticias de la creación de un nuevo proyecto andalucista por las redes sociales y las noticias nos la vuelve a dar el enterrador del andalucismo.

Mal empieza este proyecto del que sólo sabemos que no va a tener  formato de partido al uso porque, según Ruiz, este modelo ya está superado por la realidad social. Pero no dice nada más, no vaya a ser que le quiten el sitio. Todavía no se ha dado cuenta  Antonio Jesús Ruiz  que un sitio en medio de la nada es, sencillamente, la nada.  Y, mientras, muchos andalucistas de corazón, concejales e, incluso, alcaldes, sin saber nada.

Quédate con Irene García y no lo estropees, amigo.