Opinión

Seguimos llegando mal y tarde

Seguimos llegando mal y tarde
El desastre organizativo en cuanto a medidas y protocolos sanitarios es total. Hasta el punto de que hay miles de personas contagiadas que no pueden conseguir la baja para sus trabajos por la imposibilidad material de los sanitarios que nos recuerdan a todos que un día les aplaudimos pero que hoy se encuentran en una lamentable situación de desborde total de trabajo sin que obtengan una solución.

Han pasado de no tener material EPI a estar desbordados por el trabajo.

Nos cuenta la Ministra que en cuanto acabe la sexta ola se hará lo que se llama la “gripalización” que es el considerar al Coronavirus no como una pandemia sino como una endemia a pesar de que los expertos siguen hablando de que seguimos en pandemia y que puede haber más olas. No se puede hablar de ser como una gripe cuando estamos por encima de los cien muertos diarios.

También nos hablan de cambiar los protocolos de información diarios de incidencia para, según dice, no alertar a la población. Esto está de acuerdo con lo que ocurre actualmente y, sobre todo, desde que se empezaron a vender en las farmacias los autotests de antígenos. Desde entonces, hay miles de personas contagiadas que no entran en esas estadísticas de incidencias diarias porque se tienen que buscar la vida por su cuenta: test de antígenos, hacen sus cinco días de cuarentena en casa y como esos tests no tienen validez oficial pues esos contagiados no cuentan. Otros ni siquiera harán cuarentena y estamos hablando de muchos miles de personas en toda España, por lo que las cifras diarias de incidencia que se nos dan no son reales y también quieren quitarlas y hacerlas semanales. Así no nos enteramos bien de lo que, realmente, está ocurriendo.

Y ahora voy al tema de la venta de los tests de farmacias. Desde hace meses se está pidiendo, fundamentalmente, por las asociaciones de consumidores, que se regule la venta de estos y que se amplíe en grandes superficies y supermercados como se hace en otros países. Toda Europa los lleva vendiendo así desde hace meses. Aquí no sé por qué oscura razón no se ha hecho hasta que han pasado las Navidades, periodo en el que se han vendido veintiún  millones de tests a precios abusivos, llegando a 15 euros en algunas farmacias.

Aquí en Algeciras los he comprado a 7,5 euros en la farmacia de cerca de mi casa. En otras, a 4,95.

El precio oficial máximo autorizado hoy por el Gobierno es de 2,94 euros. Una diferencia bestial  con respecto a estos meses anteriores y donde la especulación ha sido muy grande y permitida.

En definitiva, de desastre y mal y tarde, como siempre. No aprendemos.