Opinión

Huelga 25 de mayo. Estabilidad ya

Huelga 25 de mayo. Estabilidad ya
Repaso y repaso. Releo y releo las palabras de un maestro. Un maestro de siempre, de los de antaño y de los de su tiempo. Un maestro de postguerra, espíritu libre en una dictadura política, moral y religiosa. Para poder serlo hubo de jurar los “principios del Movimiento Nacional” y no le temblaba ni el corazón, ni el pulso cuando de expresarse se trataba.

Adalid de la creación literaria, cofundador de la revista “Bahía”, inquietudes de anunciar un presente esperanzador, recogimiento en sentimientos íntimos y profundos, ferviente creyente en “el Jesús de Nazaret” no es “su iglesia”, en el mensaje de Paz y Vida a las gentes de buena voluntad. Ese es, era, el Maestro Don Antonio Sánchez Campos.

Hoy, otro día señalada por la Huelga convocada en la docencia andaluza pública por la dignidad de la "estabilidad ya", encontramos su poema Huelga, dedicado tanto a quienes la hacen como a los que no. Poco hay que añadir porque D. Antonio  dejó muy pero que muy claro a los que  van “el valor de unos pocos”, “que en la lucha emprendida prestaran el corazón en la pelea”. A los que siguen la cotidiana tarea, simplemente constata que se quedaron dormidos en los “estratos de la abulia”. Y aunque suene a reproche que nadie se llame a engaño o se dé por aludido, ya que refleja el amargo reconocimiento de aquellos “pusilánimes sin meta” que cual “rebaño en la querencia, nos vamos sin morder al matadero”. 

Huelga

Hemos apisonado

el valor de unos pocos

que alzando una bandera

quisieron levantar la vista el cielo

No hubo un eco de carne palpitante

que en la lucha emprendida

prestara el corazón en la pelea

y todo se quedó

dormido en los estratos de la abulía.

Sigue el poeta y tacha:

Haría falta un yunque

que surtiera el sentir

de tanto pusilánime sin meta

y tanto el mineral como la fojra

me temo, amigo mío, 

escaparon de España ya hace tiempo.

Porque todos, rebaño en la querencia

nos vamos sin morder al matadero.