Así lo recoge en su informe ejecutivo “Propuestas de mejora de las infraestructuras ferroviarias del Puerto Bahía de Algeciras y el Campo de Gibraltar”, resumido por la AET en una nota.

El objetivo de este estudio es dar a conocer, tanto a la sociedad civil, como a las administraciones, que existen “otras opciones de mejora ferroviaria”, con cuya ejecución el puerto de Algeciras y la comarca gaditana del Campo de Gibraltar lograrían “un mayor desarrollo económico, social y ambiental, al ser más competitivos y sostenibles”.

La primera alternativa que plantea es la de la variante entre La Indiana y Almargen, en la provincia de Málaga, de 30 kilómetros y con prestaciones de línea de alta velocidad, para evitar que los trenes de mercancías y materias peligrosas eviten el paso por la localidad malagueña de Ronda, parada que sí efectúan los trenes de pasajeros.

El desarrollo de este proyecto “aumentaría la capacidad de arrastre de las locomotoras al eliminar gran parte de las rampas que impiden mayor eficiencia de los trenes de mercancías”, según la AET.

El trayecto entre Algeciras y Bobadilla se reduciría a una hora y media de duración y el proyecto requiere una inversión de 1,8 millones de euros, a los que habría que restar las actuaciones ya ejecutadas en la zona y aquellas que están en ejecución actualmente.

La segunda propuesta, con un presupuesto estimado de 652,7 millones de euros para su trazado más corto, sería una nueva infraestructura Algeciras-San Fernando-Jerez de la Frontera, que supondría “una alternativa complementaria” a la actual Algeciras-Bobadilla.

Su principal ventaja, según la AET, sería que supondría un “revulsivo” para la movilidad de personas entre ambas bahías, “sostenible y segura”.

Además, reduciría el tiempo de viaje entre Algeciras y Madrid, de las casi cinco horas y media actuales a cuatro horas y quince minutos, además de conectar por ferrocarril los puertos de Algeciras, Cádiz, El Puerto de Santa María, Sevilla y, en menor medida, Huelva.