"!Gracias Algeciras¡ Tenemos 1.460 días por delante para seguir mejorando tu vida", así comienza el mensaje de agradecimiento del Partido Popular por el excelente resultado obtenido en las elecciones del 26M.

Con 17.903 votos y un 40,93% de porcentaje, José Ignacio Landaluce ha logrado su tercera mayoría consecutiva en las elecciones municipales, superando incluso los datos de 2015, aunque eso no se haya traducido en una mayoría absoluta de la que apenas le han separado un centenar de votos.

En 2015, fueron 17.675 votos, lo que significa que no ha acusado el desgaste propio de quien lleva ocho años al frente del consistorio, y al que ya se le podía “echar en cara” la gestión municipal lejos de la nefasta herencia recibida de manos del PSOE e IU.

Se presentaba una campaña dura, con once partidos en liza; la aparición de Vox que suponía un importante bocado por la derecha; el mantra del estado de las barriadas, la gran apuesta en este mandato; pero, sobre todo, por la intensa campaña de desprestigio político y personal, que el partido y la persona de José Ignacio Landaluce, han sufrido a manos de un sector de la estiba algecireña (no toda), y de determinados medios de comunicación.

El sindicato Coordinadora, mayoritario en el sector de la estiba, pensaba que iba a ser decisivo, que su lucha iba a debilitar al candidato del PP y cambiar el signo político de toda una ciudad, pero finalmente se ha demostrado que fuera de los muelles, los agitadores de Coordinadora apenas han logrado mover un puñado insignificante de votos.

A José Ignacio Landaluce, muchos estibadores no le han perdonado el que entienden que fue poco apoyo en su lucha por el sector, y así se lo han hecho saber en multitud de ocasiones. Así las cosas, muchos entendieron que había que castigarlo y a fe que lo han intentado, pero con escaso éxito.

Lamentable ha sido la campaña de mentiras que el alcaldable por el PP ha tenido que sufrir por parte de determinados medios de ¿comunicación?, que han entendido que la mejor forma de progresar o aumentar el “click” es desinformando. Triste realidad que obliga a los lectores a buscar la información veraz y contrastada, y que no les ha servido a estos medios para sus oscuros intereses.

Otro de los puntos fuertes que Landaluce ha logrado superar ha sido la aparición de Vox, una fuerza que en Autonómicas y Generales sorprendió con buenos resultados, pero que en las Municipales se ha quedado lejos de sus expectativas, aunque con un meritorio y trabajado resultado, para ser un partido de reciente implantación.

Las barriadas, el punto más débil de la gestión del Partido Popular en estos ocho años, también pesaba como una losa. José Ignacio Landaluce heredaba en 2011 una difícil situación con una bancarrota técnica y mas de 260 millones de euros de deuda, que ha lastrado y lastrará los próximos años.

Así y todo, desdelos diferentes departamentos técnicos del Ayuntamiento de Algeciras, se ha trabajado para poder acceder a líneas de subvenciones de las diferentes administraciones. El propio alcalde lo confesaba a Horasur en una entrevista en Objetivo Algeciras, “hemos dedicado muchos esfuerzos para embellecer la ciudad, y ahora les toca el turno a las barriadas”.

Es el momento, la gente le ha dado un voto de confianza, y si logra que los vecinos encuentren sus barriadas como merecen, posiblemente habrá empezado a ganar las elecciones de 2023.

Ni un paso atrás por tanto para un alcalde, que se ha ganado el respeto de sus vecinos y que se lo han demostrado con un incontestable resultado electoral.