“Es indudable que la reclamación realizada desde Extremadura es lógica, así como la disculpa y las medidas emprendidas por la ministra de Transportes, Raquel Sánchez, para darles una solución, pero lo que no tiene sentido, es que teniendo nuestras líneas ferroviarias muchas más incidencias y retrasos, sigamos siendo totalmente ignorados, víctimas de la apatía de un gobierno que ni está ni se le espera, en una reivindicación histórica de nuestra tierra” ha apuntado el regidor algecireño.

Así, una vez más el primer edil ha reclamado que “tal y como se va a hacer en Extremadura, donde Renfe ha rebajado un 50% el precio de los billetes como solución temporal a su problemática, desde Algeciras, desde el Campo de Gibraltar, exigimos que también se nos apliquen promociones especiales o descuentos para paliar las molestias causadas a los pasajeros de la línea férrea a Madrid, que durante todo el mes de agosto y principios de septiembre, tendrán que hacer la ruta en autobús a Málaga y allí enlazar con el AVE hacia Madrid”.

Además, ha señalado que “esto, por supuesto, sería tan solo una pequeña tirita a una herida que desangra nuestra tierra, que nos impide crecer y desarrollarnos en la plenitud de nuestro potencial, atraer nuevas inversiones y más turismo” y ha asegurado que “los usuarios de nuestros trenes de pasajeros, así como las empresas que necesitan transportar sus mercancías, no merecen el mal trato que se les está dando, por eso continuaremos reclamando unas infraestructuras más modernas y sostenibles, locomotoras y vagones más cómodos y dignos, y un mejor servicio a nuestros ciudadanos”.

Para finalizar, Landaluce, haciéndose eco de la noticia de que la licitación del tramo San Pablo-Almoraima ha quedado desierta por el precio de las materias primas y de los combustibles, ha solicitado que las inversiones que vengan a nuestra tierra tengan unos precios adaptados a la realidad social y económica que estamos viviendo actualmente “de nada sirve anunciar millones de euros que resultan insuficientes para el trabajo que se pide a las empresas, es tan solo una forma más de seguir alargando de forma innecesaria algo que necesitamos con la mayor de las urgencias, por eso aunque en la situación que estamos viviendo se hace complicado, es imprescindible que estos precios se revisen y negocien para que este problema pueda alcanzar una solución”.