El pasado martes, Manuel Sánchez Calero, buzo profesional, desaparecía cuando realizaba una inmersión nocturna en compañía de miembros del club de buceo El Estrecho. A pesar de la intensa búsqueda esa misma madrugada y en los dos días posteriores, lo cierto es que el operativo dependiente de Salvamento Marítimo y Guardia Civil se ha ido reduciendo con el paso de las jornadas.

La Guardia Civil sigue buscando a través del Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (GAES), pero desde Salvamento Marítimo apenas se realiza una pequeña batida visual, antes de incorporarse al dispositivo de recogida de inmigrantes ilegales en aguas próximas a Marruecos.

La desesperación se ha apoderado de amigos y familiares, que siguen buscando con la colaboración de voluntarios, pero lamentan la poca ayuda que están recibiendo del dispositivo activado por el 112 de Emergencias de Andalucía, que engloba a Guardia Civil y Salvamento Marítimo, exclusivamente, ya que el resto de las unidades como Policía Nacional, Policía Local o Protección Civil, no disponen de equipos de búsqueda en el mar, y tampoco tienen competencias.

Una persona cercana al buzo desaparecido compara la escasa implicación del dispositivo en el caso de Manuel Sánchez Calero, y el despliegue realizado en Lora del Río estos días, para localizar también a un hombre desaparecido.