Tal y como anunciaban las previsiones meteorológicas, la entrada de una nueva borrasca atlántica desde el suroeste peninsular desde el miércoles  traería más lluvias a lo largo de la semana. Pero además, la propia posición de la borrasca ha supuesto una nueva irrupción de polvo sahariano transportado por vientos del sur que han aportado aire cálido y cargado de partículas desde África a toda la Península Ibérica, lo que mezclado con las precipitaciones está ocasionando las lluvias de barro desde el mediodía de hoy jueves.

De esta manera, la jornada en la comarca se está viendo marcada por estas inusuales condiciones meteorológicas, que han traído la ansiada lluvia para una zona en sequía que en unas tres semanas podía afrontar las primeras restricciones de agua. Pero también está tiñendo de un naranja turbio el cielo, provocando unas imágenes poco habituales y las lógicas molestias de una lluvia cargada de tierra, como las que siguen precipitándose sobre el Campo de Gibraltar.