ALGECIRAS. - Esperábamos un final feliz para Yaki y para su dueña Manme, pero no ha podido ser, y se han confirmado las sospechas que ya algunas personas habían dejado entrever en las redes sociales. Yaki, el perro de agua que reclamaba su dueña y que la perrera de Los Barrios aseguraba que había dado en acogida, en realidad fue sacrificado casi en el mismo momento de llegar a las dependencias de la empresa Control Zoosanitario. Así nos los confirman fuentes próximas a la familia, que apuntan que esta mañana se han desplazado a la perrera en compañía de agentes del Seprona, y que la propia perrera ha confirmado el sacrificio del animal sin que hayan transcurrido los diez días que estima la ley necesarios para que su dueños pueda recuperarlo. Horasur ha tratado de ponerse en contacto con la propietaria del animal, pero familiares nos han indicado que se encuentra en un estado de ansiedad. Estas mismas fuentes apuntan que el Seprona ha asegurado que van a llegar hasta las últimas consecuencias, para tratar de averiguar qué es lo que ha pasado. Al parecer, y siempre según estas fuentes, desde la empresa que gestiona la perrera se les ha indicado que el perro estaba en malas condiciones. A través de las redes sociales, son muchas las voces que piden una investigación sobre los hechos, incluso están apareciendo datos de otros casos similares que se podrían haber producido en la misma instalación.

El caso de Yaki

Yaki se perdió el pasado domingo mientras paseaba con su dueña por la zona del Rinconcillo. Al día siguiente, recibe una llamada de la perrera de Los Barrios, en la que le dicen que su perro, que tenía toda la documentación, vacunas, y microchip, se encuentra en las instalaciones y que puede pasar a recogerlo previo pago de 50 euros. Manme, la dueña, les pide un tiempo porque en ese momento, debido a una delicada situación económica, no pude hacer frente al pago. Unas horas mas tarde, cuando Manme se desplaza para recoger al animal, le dicen desde la empresa que gestiona la perrera, que Yaki ha sido dado en acogida y que se encuentra en Mijas. La propietaria pide el regreso de su perro y ante las dudas de la empresa, decide poner una denuncia en el Seprona. Esta mañana el Seprona, acompañado de la dueña del perro y otras personas, se han presentado en las instalaciones donde la empresa les ha confirmado, siempre según fuentes de la familia, que el perro ha sido sacrificado. En las redes sociales, varias personas confirman también este extremo.