Enrique Santiago ha señalado que las protestas tienen "una línea laboral", la de "un sector con unas características especiales", ya que "no son trabajadores dependientes, sino que son pequeños empresarios, con regímenes de la Seguridad Social que no son exactamente idénticos".

Y, por otro lado, ha puntualizado que "hay otras reivindicaciones que no son de control del Gobierno, como las descargas de camiones, que dependen de los contratos de los suministradores con las grandes cadenas de supermercados y las empresas en las que los transportistas prestan sus servicios".

Estas demandas, según Santiago, "dependen de la contratación bilateral en el marco de la economía de mercado. Si hay que intervenir más en el mercado o no, es algo sobre lo que no hay consenso en este país".

Pese a todo, ha reconocido que se trata de "un tema muy complejo y que entendemos la justeza de esas reivindicaciones. Somos sensibles y vamos a hacer lo posible por atenderlas".