Vespa orientalis
Vespa orientalis

La invasión del avispón oriental se expande ya desde el Campo de Gibraltar hasta Jaén

La invasión del avispón oriental se expande ya desde el Campo de Gibraltar hasta Jaén
Dos apicultores jienenses han comunicado la presencia de Vespa Orientalis, una especie invasora de avispón que se cree que entró en la Península Ibérica a través de Algeciras hace unos tres años, expandiéndose rápidamente por la comarca.

Dos apicultores han comunicado a la Coordinadora de Organizaciones Agrarias y Ganaderas (COAG) la presencia de Vespa Orientalis, un tipo de avispón procedente de zonas cálidas del Mediterráneo Oriental y noroeste de África, que causa graves daños a la apicultura.

COAG ha alertado de la presencia de esta especie ya que ataca a las colmenas de abejas en busca de alimento, matándolas y se llevan las reservas de miel y polen.

Los apicultores descubrieron en patios de Jaén ejemplares de esta especie invasora y exótica que se ha establecido mayoritariamente en el sur de la Península Ibérica, donde las condiciones climatológicas favorecen su desarrollo, avistamiento en Jaén que ha hecho saltar las alarmas.

Hasta el momento se estaba expandiendo a gran velocidad por la zona del Campo de Gibraltar y por la costa malagueña, por las buenas condiciones de habitabilidad que representan estos climas y se cree que las reinas han podido llegar a Jaén desde Cádiz en algún vehículo de transporte de gran capacidad.

Desde COAG se están estudiando las medidas a tomar como las de solicitar permisos para trampear los nidos, eliminar a las reinas y evitar así su expansión, según explica Tomas Torralba, responsable de Apicultura en COAG Jaén.

La Vespa orientalis tiene un tamaño de entre 25-35 mm, la cabeza, el cuerpo y las patas son rojizas y cuentan con un gran parche amarillo en el rostro, fácilmente identificables por sus dos franjas color amarillo vivo casi al final del abdomen. Al ser otra especie de avispa invasora se confunde habitualmente con la Vespa velutina o "avispa asiática", cuya presencia también confirmada en el Campo de Gibraltar es mucho más reciente, tras llegar desde la zona norte de la Península procedente del sur de Francia, donde inició su expansión en Europa.  

En el último año, la extensión poblacional de la Vespa orientalis está suponiendo un verdadero problema para la apicultura, ya que puede provocar importantes pérdidas en el sector agrícola al atacar los frutos y dejarlos sin valor comercial.

COAG Andalucía comenzó una campaña, en el mes de noviembre, alertando sobre el problema e inició el expediente de solicitud en el Ministerio para conseguir que se catalogue como especie exótica invasora y se ponga en marcha un programa para su control, un procedimiento que puede tardar años, aunque se pueden solicitar permisos concretos para combatirla.

La invasión del avispón oriental se expande ya desde el Campo de Gibraltar hasta Jaén