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El Algeciras sumó ante el Arroyo un punto de esos que se deben hacer buenos el próximo miércoles ante el Melilla. De nuevo Extremadura fue tierra abonada para los algeciristas y los cuatro puntos que se han logrado lejos de los muros del Mirador en tierras extremeñas. Un duelo intenso, trabado, condicionado por el césped artificial y la humedad que provocó evitar riesgos innecesarios. El empate puede considerarse justo ya que si bien el Algeciras tuvo dos muy claras, los de casa apretaron de lo lindo y rondaron el área. Ambos conjuntos lo dieron todo y no se les puede reprochar nada. Los algecireños siguen siendo un equipo al que derrotar cuesta un mundo y eso en la categoría de bronce es un valor a mantener. De momento, la cosa marcha, faltó concretar las pocas que hubo, pero poco más se podía hacer en un terreno de juego, bueno, pero que no es la hierba natural. El punto, dicho queda, es positivo y además se abre una semana intensa con buenas sensaciones. Comenzó el partido, como se esperaba, con el cuadro local apretando, aunque ni mucho menos el complejo municipal cacereño tiene nada que ver con El Palo. Unas dimensiones aceptables, con un público respetuoso y entusiasta. Los de casa empujaban aunque no llegaban, con claridad, al marco de Romero. El once de los algeciristas, de nuevo de negro, no tenía a Javi Chico y el entrenador de Bornos optó por Melchor, Andújar y Alfaro como llegadores con Harper arriba. Aguantó el cuadro visitante el primer arreón y aunque no había dominio claro de ninguno de los contendientes, intentó tocar el balón con Parada como referente con Berlanga guardando las espaldas. En ese ir y venir estaba el partido, con mucha lucha, cuando llegó una de esas ocasiones que llegan a lamentarse. Parada metió un balón en profundidad a Alfaro que se plantó sólo ante Juanma pero su remate no superó el cancerbero. Era el minuto 19 y pudo ser el cambio de guión en el duelo. Hasta ese momento sólo los balónes aéreos y un inquieto Ruano hacían ruido en torno a la fiable zaga algecirista. De nuevo Alfaro lo intentó en el 21 pero su remate se marchó fuera por poco. Se entró entonces en una fase de mayor dominio arlequinado aunque sin concretar salvo un par de internadas de Juanjo por la izquierda que quedaron en nada. Una protesta de la grada por una caída dentro del área de Juanfran y un par de intentos de Andújar, que acabaron en fuera de juego, siriveron para llegar el descanso. Más empuje y presión que fútbol.

Romero y Mario

La reanudación comenzó con variantes. Berlanga, que se lesionó, dejó su sitio a Mario. Salió el Arroyo aumentando la presión y en los primeros 20 minutos hubo de todo. Buades, en un cabezazo tras saque de esquina, Juanfran pudo marcar pero Víctor lo evitó y Romero salvó en el 58 lo que pudo ser el tanto de Willy. Sufría el Algeciras pero supo, con Parada y los centrales enormes, aguantar y no dejar de pelear, todos, pero sobre todo asustando. Andújar, que se llevó la ovación tras ser sustituido, la tuvo en el 61 pero su remate salió ajustado al palo. Y por último, en el 67 llegó otra de esas de lamentar. En este caso hubo acierto del meta Juanma que sacó, como pudo, un tremendo obús de Mario que sacó un falta desde la derecha, y que casi se cuela en la red. Hasta el final pelea, empuje, balonazos y un equipo, el de Sanlúcar, al que hay que tumbar, varias veces, para que no se levante. Punto importante.     

Ficha del Partido

Arroyo C.P: Juanma; Manu, Santi Polo, Bayón, Castaño; Abel Buades, Juanjo (David, González, 72'), Juanma Morán, Juanfran; Ruano y Willy (Espinar, 62') Algeciras C.F: Romero; Máiquez, Víctor González, Carlos Fernández, Merino; Berlanga (Mario, descanso), Parada, Melchor (Iván, 74'), Alfaro; Andújar (Javi Fernández, 91') y Harper Árbitro: David Gálvez Rascón. (Madrid). Por parte visitante amonestó a los locales Juanfran (59') y Buades (79'). Por parte visitante Merino (31'), Víctor (53') Incidencias: Partido correspondiente a la décima jornada de liga en el Grupo IV de Segunda División B disputado en el Municipal de Arroyo de La Luz ante unos 700 espectadores. Terreno de juego de césped artificial. Antes del inicio del choque se entregó una placa al ex árbitro Ceballos Silva y se guardó un minuto de silencio por el fallecimiento de un socio del conjunto cacereño.