(0-1) Gallardo perdona una goleada al Decano
08 de noviembre de 2015 (16:39 h.)
HUELVA. - El Nuevo Colombino, como anteriormente el Romano de Mérida, sucumbió ante los hombres de verde que, otra vez, demostraron una capacidad táctica, de sacrificio y de solidaridad que doblegaron al Decano en un escenario espectacular. Todo ello, además, pese a la desastrosa actuación de un Adrián Gallardo que deberá pasar por el diván. No es normal la de ocasiones que perdió el delantero, que no jugó titular, y que evitaron un marcador de auténtico escándalo en favor de los suyos. No obstante, el Algeciras, ni un mérito hay que restarle, volvió a ser un equipo rocoso, cerró el marco y aprovechó, no cabe duda, el mal momento de un rival que, no obstante, tiene calidad aunque fue bloqueado por el Algeciras. Tres puntos muy importantes, se corta la sangría y ahora más que nunca hay que, no sólo ayudar a estos jugadores, sino sumar esa victoria pendiente, esperemos, ante el Jumilla. El Algeciras, más allá de algunas críticas, sigue demostrando que le van los grandes escenarios y que no se amilana.
Arrancó el partido con un once muy novedoso por parte de Mere. De nuevo con el uniforme verde, como en Mérida, y en un escenario, no está de más recalcarlo, imponente. Manzano reforzaba el centro del campo, Iván estaba en el enganche y Javi Medina era la punta de lanza. El Recre, con una zaga de circunstancias, ni mucho menos salió en tromba. No están cómodos los del Decano y saben que cualquier error se paga. Su gente les ayuda pero también les exige. La lesión de Alvar, que finalmente pudo seguir en el primer acto, en el minuto tres no ayudó a dar ritmo al partido. Sólo un error, en la entrega, de Cristo Díaz provocó un acercamiento del brasileño Arthuro, tras recibir de Waldo, pero Josemi, que también tuvo que ser atendido, mandó a córner. Era el minuto 10 y hasta entonces poco reseñable en las áreas.
[caption id="attachment_45452" width="460"] Un lance del Recre - Algeciras disputado hoy. Foto: H.Corpa / huelva24[/caption]
Los de verde apretaban la salida del balón de los centrales de casa, con Jesús Vázquez entre ellos en muchas ocasiones, y ponían en aprietos a la zaga. Javi Medina, de nuevo mostró muchas cosas, amagaba pero ese último pase, otra vez, no llegaba. En el 31 una arrancada de Luque quedó en nada. El malacitano tenía a Melchor sólo en la derecha pero no lo apreció. En el 36, ya con los visitantes asentados y el murmullo en la grada, Cristo Díaz lanzó una falta que se marchó alta y en el 40 otra cabalgada de Luque, llegó hasta casi el palo del marco de Rubén, no acabó en gol de milagro. Sin excesos pero sabiendo, siempre, lo que había que hacer, los de Mere, otra vez lo estudió de lujo, iban ganando metros. En el 43 llegó una nueva caída a banda de Javi Medina. Se fue por la derecha centró al corazón del área y allí Iván, como no, la dejó suave para Melchor que mandó un pase a la red. Golazo y el Recre que temblaba, más aún cuando Moya, por una mano inocente, fue expulsado antes del pitido final a un gran primer acto. No obstante, aún quedaba mucho por hacer.
Partido muy trabajado por el Algeciras. Foto: H.Corpa / huelva24[/caption]
La salida de los de casa fue en tromba y el rival, extrañamente, no era capaz de tener la pelota pese a la superioridad numérica. Los 10 primeros minutos fueron un acoso, aunque sin derribo, sobre el marco de Josemi. El interior Waldo, el recién entrado Miguelito y una de Keita, ponían cerco al área de los del Mirador. Parecía que el Algeciras lo único que quería era el final del encuentro y, sin embargo, restaba mucho. El fútbol no existió en este periodo y las ganas de los propietarios del terreno de juego eran más vergüenza torera que ideas. El balón iba y venía sin mucho criterio, aunque los de verde, no tenían la calma suficiente para encontrar los espacios que, obviamente, existían.
En el 73 un excelso Javi Medina dejó su lugar a Adrián Gallardo. El isleño, con el cansancio y la superioridad, debía dar la puntilla. Cristo Díaz, en plan líder, dejó en dos ocasiones al nueve delante de Rubén, también Willy asistió a su compañero para que anotase sin muchos inconvenientes. Sin embargo, nunca fue capaz de superar al meta rival. La última, ya en el descuento, fue casi caótica. Gallardo se fue sólo, como en las anteriores, e intentó regatear al meta, se escoró y cayó al suelo. Acabó el partido y el jugador llegado de Filipinas fue consolado por sus compañeros. Afortunadamente no hubo que lamentar la igualada que ¿habría sido?.. mejor ni pensarlo.
El Colombino, escenario casi impensable de visitar hace un año sucumbió ante los de verde que, incluso, pudieron golear.