Cordoba B - Algeciras4, Mar2014
Once titular del Algeciras CF en Córdoba / Foto: Martín Gil

En la Barra: ¿Un marrón o una alegría?

En la Barra: ¿Un marrón o una alegría?
Banner Estrella Galicia ALGECIRAS. - Llegamos a nuestra barra con Estrella Galicia para anunciar que esta semana, por motivos obvios, estará abierta prácticamente todos los días. Gracias a los que cada día se suman a ella y degustan la cerveza Estrella del algecirismo. Los rojiblancos se encuentran, ante el gran partido, en el peor momento de la liga. Atascados, en crisis, perdiendo la ventaja con el descenso que han trabajado durante todo el año, y todo lo que quieran añadir en el lado negativo. Sin embargo,  tienen la opción de curar, ante su gente, todos los males que viene arrastrando en las últimas siete semanas, salvo Albacete, o por el contrario llevarles, no sólo a luchar por la permanencia sino hacerlo con la parroquia de uñas. Es decir hora de valientes y de hombres, como ya se escucha en la caseta. “De marrón nada”, apuntan desde un vestuario que, a partir de hoy estará mudo para referirse a lo que supone jugar contra el  eterno rival tras una racha como la actual. Un inciso para esto. Vaya por delante que todas las decisiones son respetables, pero al mismo tiempo también se pueden comentar, con ese respeto. Personalmente, y creo que coincido con el resto de compañeros de medios de comunicación que seguimos habitualmente al equipo, no me parece oportuno. Desconozco si la orden procede de Sanlúcar, de la directiva o del que coloca los banderines. Salir ahora con “la Balona en la ida hizo tal o cual”, me parece de poca clase. La que demostró en el Municipal la directiva blanquinegra, que no la afición, muy por encima de sus dirigentes. Eso sí estoy convencido que aquí, al menos, no cometeremos el mismo error con los que vengan a trabajar a nuestro estadio Nuevo Mirador. Pero igual que se critica una cosa hay que poner sobre el tapete, con respeto siempre, que lo de no hacer declaraciones en una semana tan importante no parece apropiado. En Horasur algunas leerán ya que el domingo, tras la derrota en El Carpio, si pudimos hacer referencia a lo que se avecina. Bien, perdón por la perorata pero quería soltarla, vamos con lo deportivo. En el césped artificial cordobés llegó otro varapalo. Es cierto que el equipo  se pareció, y no es falsa excusa, al que tantas alegrías ha propiciado, aunque sin continuidad. Los que reciban información, en la calle, sobre la posible goleada que pudo encajar el equipo, otra vez Romero, sepan que no les mienten, aunque no le cuentan toda la verdad si le dicen sólo eso. Hasta el 1-0 el Córdoba B pareció más intenso pero luego el conjunto del Mirador fue ganando terreno y perdonó, antes no lo hacía, tres ocasiones de las de manual. Tras el segundo, lógico,  pudo caer alguno más. Pero todo esto ya es historia. La parte mala, no se puede ocultar, es que son muchos goles encajados en los últimos tiempos, que la dinámica es mala y que el colchón de puntos  con el descanso está casi al límite. Todo eso es cierto, pero no los es menos que ganar un partido es acabar con todo el sufrimiento. Y la próxima ocasión, con premio doble, es nada menos que ante el eterno rival. Ese equipo que, señorío ante todo, está completando una gran temporada aunque se deja en casa sus opciones de pelear por el ascenso a Segunda A. La última ante el Cádiz, ese club tan hermano de los blanquinegros pero que, con buenos o malos conjuntos, casi siempre, se lleva los puntos del Municipal. Quizás, es sólo una opinión y muy subjetiva, tanta parafernalia cuando estás compitiendo por lo mismo no ayuda. Con esto, para los demagogos y apóstoles que esta semana saldarán, no se incita a la violencia, ni nada por el estilo. En la ida, quedó demostrado, las dos aficiones de los eternos rivales del Campo de Gibraltar,  se comportaron como lo que son, entidades señeras, aunque los mandatarios y palmeros de Gallardo, intenten incluso atacar a los suyos por exponer su punto de vista contrario a lo que se dicta u ordena desde allí, pero eso es lo de menos. Decíamos al inicio que la Estrella Galicia de hoy se abría apuntando a la posibilidad de amarrar la permanencia el domingo (18:00 horas) en el Mirador. Aún los hay que dudan. “Yo quisiera jugar y de marrón nada”, espetó Sanlúcar en Córdoba. “Es la mejor manera de recompensar a la afición”, apuntaban los jugadores que, al menos, tras la derrota, dieron un paso al frente y son conscientes que el domingo la gente les llevará en volandas y borrar de un plumazo el mal tramo de liga actual, incluso los perdonarían esos que ahora, con cierta justicia, les señalan. Claro que el contrario, más allá de lo que supone el  duelo, es un señor equipo. Dicho esto, los rojiblancos han mostrado, en más de una ocasión, sus capacidades ante rivales de enjundia. “En ese vestuario hay cochinos y hombres, tenemos que dejarnos los huevos para ganar ese partido”, palabra de Javi Fernández, el héroe del día del Cádiz.

En la Barra: ¿Un marrón o una alegría?