El Algeciras, que está jugando partidos cada dos días, ya conoce todos los resultados, es lo de menos, en esta pretemporada. Ha ganado dos partidos (ambos al Ceuta), cayó goleado ante el Córdoba (1-4) y ha igualado ante otro rival de su categoría, aunque en distinto grupo, el Melilla. 

Un partido disputado en una calurosa mañana, de nuevo con público en las gradas, y en el que se notaron varios factores. Por un lado el cansancio de los de Salva Ballesta, llevan carga de trabajo y partidos muy seguidos, y por otro que el Melilla, siendo un buen rival, no es el Córdoba.

Los dos técnicos habrán sacado conclusiones pero en general el encuentro resultó aburrido. Y eso que los partidos, ahora, se afrontan con más intensidad que en un verano normal. Al menos hasta que aguanta el físico.

En los de casa formaron: Romero; Alcázar, De Castro, Robin Lafarge, Marc Llinares; Raúl Hernández, que sigue acumulando más minutos que nadie, Juanma Justo, Yelko, Álvaro Romero, Juan Serrano y Marcos Mendes. 

Flojo primer acto de los de casa en los que, de nuevo, hubo algún desajuste defensivo, sobre todo por parte de Robin. En los de casa Yelko intentó crear pero le faltó continuidad. Juanma Justo fue de menos a más y sólo destacar la voluntad de Marcos Mendes, aunque al delantero se le ve algo ansioso por marcar su primer tanto.

El Melilla, bien plantado, tampoco se prodigaba en exceso, en ataque, aunque tuvo más sensación de dominio. En el 17, Mendes, dudó, cuando se encontraba en buena posición para el disparo y la ocasión quedó en nada.

Primeros minutos de Yago

Fiel a su costumbre, Salva, no modificó el once inicial. Lo está haciendo a medida que avanzan los duelos. Del vestuario surgió un revoltoso El Watani, en los visitantes, aunque fue más ruido que nueces.

Antes de que la parroquia comenzase a mostrar cierto desencanto, tranquilos que es época de pruebas, el Algeciras comenzó a dominar el partido. La entrada de Yago e Iván, no es casualidad, reactivó a los albirrojos que comenzaron a generar cierto peligro sobre el marco rival. Romero y Yelko en el 53 dudaron y no supieron resolver una buena acción. Para entonces Llinares ya se había entonado y confirmó lo que apuntó el pasado año.

Fue en el último tramo del choque donde los de casa no supieron rematar la faena. Ubis ya estaba en el campo y también Yeremi. Un Sub 23 que está a prueba y que llega del cuadro aragonés del Ejea. Mendes, Benítez y Dani Sales, a balón parado, pudieron dejar el triunfo en casa, pero el partido acabó sin goles. El martes más pruebas. El rival será el Sevilla Atletico.

Al margen de lo deportivo destacar que la afición sigue respondiendo aunque no faltan quejas por ver al equipo sin el uniforme oficial y sobre todo por los problemas que están surgiendo para atender la demanda de socios que quieren renovar su carnet.