ALGECIRAS. - El Algeciras C.F. sumó su octava victoria consecutiva. En el mismo tramo de la primera vuelta, al inicio del calvario, ya había perdido en Las Cabezas e igualado en la visita al Sevilla C. La Resaca de hoy comienza por homenajear a un equipo que ya tiene 70 puntos en su casillero. “Esto va camino de los 100 ”, dijo el héroe del día, Joselu. El de Talarrubias, no ya por sus 17 chicharros, se ha convertido en indispensable para el grupo y así se lo reconoció la sabia grada rojiblaca. "Es un orgullo que la gente me de ese cariño ya que acabo de llegar". El Sevilla C pareció un juguete en manos de los de Mere. La realidad es que los del Mirador han recuperado frescura, llevan 12 goles en tres semanas y más allá de la coña de la solvencia, la realidad es que los jugadores ahora parecen estar en un momento óptimo. El paso a paso de Chamorro parece que tenía sentido. Dicho esto llegará la derrota, probablemente en el momento más inesperado, pero la temporada del grupo está siendo para enmarcar. Lástima, así lo saben en el vestuario, que todo se jugará en una eliminatoria, en el peor de los escenario tres, para conseguir el ascenso. Único fin, y condena (hacía tiempo que no salía la palabreja), de la entidad que sufrió un palo de lo que se dan una en el millón y nos tocó. La Resaca les viene contando, gracias a los fieles de verdad, cada jornada lo que está siendo un camino, nada fácil, de un entrenador y un grupo de jugadores que juegan contra los rivales, la presión de estar en un club que no debería estar, pero lo está por sus errores, en Tercera y con el único objetivo de recuperar la categoría perdida. El rival, que no se esperaba seamos realistas, ha salido respondón. El Gerena, humilde en parte y algo crecido en otras, no cede como tampoco lo hace el San Fernando. Nueve victorias suman ya los de Masegosa a los que lastra su mal arranque de liga. Precisamente ese es el mérito de Mere, al menos para servidor. Se le pueden discutir decisiones, cuestiones futboleras, pero no, que ha sido un gran motivador. Ha convertido el drama en rabia, y eso no suele ser fácil. Había que decir al grupo, la mayoría vivieron la tragedia, que podrían flagelarse todo el año o convertir esa frustración en motivación y deseo de venganza deportiva. Supo manejar el momento delicado de Javi Chico y ahora el capitán, enrabietado como gran futbolista que es, está dando su mejor versión en la media punta. Está intentando mantener frescos a todos y especialmente significativo ha sido el tirón navideño. Los equipos grandes, en cualquier categoría, son los que ganan cuando lo merecen pero especialmente cuando no. Hubo duelos que los de la sagrada casaca rojiblanca no hicieron mucho pero se agarraron a esa rabia para seguir ganando. Ahora ya lo hacen con buen juego pero sobre todo con un “compromiso”, como dijo su entrenador tras el 4-0, que puede y debe ser clave hasta el final. Más allá de los que quieren un histérico en el banquillo, un vende motos, o cualquier otra cosa que les sirva, el de El Puerto, por ahora, no se ha casado con nadie y eso que hay fichajes, pedidos por él, que no han dado lo que se esperaba. Al menos sabe lo que quiere y en esas está. Contra viento y marea, con malos ratos, buenos y regulares, pero siempre, al menos de puerta hacia fuera, con una línea a seguir. Lástima que el fútbol, tan grande y miserable, sólo recordará la temporada si al final estamos, como deseamos todos, en Segunda B. Mientras tanto son 70 puntos y la visita a Gerena cada vez más cerca. Veremos entonces, aunque antes quedan varios puntos más que añadir y goles de Joselu que celebrar. (Ánimo, Iván).