GIBRALTAR. - Parece una broma pero no lo es, y es que el gobierno de Gibraltar, tras analizar el comportamiento de las colas de entrada y salida a la Roca durante los meses de febrero y marzo, ha concluido que estos controles, que desde el gobierno de España se consideran “aleatorios”, en realidad están condicionados por temas de actualidad relacionados con Gibraltar, o por los días en que juegan Real Madrid y FC Barcelona. Para sustentar este argumento, el gobierno de Fabián Picardo en una nota explica que la hora de finalización de las colas de salida no siempre es la misma, y que incluso algunos días las colas finalizan a unas horas muy determinadas. Tras una somera comparación del calendario futbolístico con las horas punta de espera, aprecian los dirigentes políticos gibraltareños como el 26 de febrero, en que a las 19h04’ poco más de un coche pasaba cada minuto la frontera y se estimaba una cola de 150 minutos, a las 20h la espera se calculaba en 120 minutos, pero a las 20h52’, la cola se había disuelto coincidiendo con el inicio del  partido del Real Madrid en la Champions frente al Schalke 04. La misma circunstancia se dio en el partido de vuelta, el 18 de marzo, donde la cola desapareció “de repente” poco antes de las ocho y media, tras más de 90 minutos de espera en las horas previas. Igual coincidencia se dio el 29 de marzo en el partido que enfrentó al Real Madrid y al Rayo Vallecano, en esta ocasión un hora más tarde que los anteriores, lo que obliga a pensar a las autoridades gibraltareñas que esta relajación en los controles se produce minutos antes del inicio de los partidos de futbol. Lo mismo ocurre, según el gobierno gibraltareño, con los partidos del Barcelona del día 26 de marzo ante el Celta de Vigo.

Otros condicionantes

Pero no de futbol viven las colas o los controles. Gibraltar entiende que cuestiones como la llegada de barcos con rocas para las obras de ampliación, discursos de Fabián Picardo como el ofrecido en Washington el 26 de marzo, o las protestas del Foreing Office sobre supuestas incursiones de buques españoles, son también motivo para que las esperas se alarguen mas allá de las dos y tres horas. Una consideración que desde el gobierno de Gibraltar no se ha estimado o no se ha querido tener en cuenta, es que mas que relajación de las colas en los minutos previos a los partidos de fútbol por acción del gobierno español, pudiera darse la circunstancia de que a esas horas haya muchos menos vehículos y peatones en las entradas y salidas, precisamente para poder ver los encuentros. Es otra posibilidad.