Así aparece reflejado en un auto de la Audiencia Nacional del que se ha hecho eco El País, en el que se relata la declaración que Kanjaa prestó al juez Gadea cuando fue trasladado a Madrid a las horas de cometer el trágico crimen de Algeciras.

Yassine Kanjaa definió a sus víctimas como "enemigos del islam y de los musulmanes" y reconoció su intención de "quitar de en medio a más gente". Además, el auto refleja que el asesino, en los tres días previos al atentado, había tenido la sensación de "verlo todo negro, ver la muerte o pensar en suicidarse".

Esta declaración es un elemento de juicio más a tener en cuenta en la consideración final que tendrá Kanjaa para ser juzgado por el crimen. Su defensa ha solicitado en varias ocasiones que se le someta a un examen psiquiátrico para determinar que la causa del crimen no fue el yihadismo sino una perturbación mental del detenido, lo que implicaría que no fuera juzgado por la Audiencia Nacional sino por un juzgado de Algeciras y que no se le someta a una pena de prisión sino a la de reclusión en un sanatorio penitenciario.