La organización se dedicaba a captar para traer a España a mujeres jóvenes, de entre 18 y 22 años y de bajo nivel cultural desde Colombia, para explotarlas sexualmente en varios domicilios utilizados como prostíbulos en Algeciras, Los Barrios, San Roque y La Línea. Las víctimas eran transportadas en calidad de turistas a España, donde eran trasladadas a los prostíbulos. Con el viaje, contraían una deuda con sus explotadores, que tenían que pagar con el ejercicio de la prostitución mientras permanecían en las casas, donde estaban sujetas a horarios que, si no cumplían, eran multadas con el aumento en el importe de la deuda.

Del mismo modo, los miembros de la organización traficaban a pequeña y mediana escala con el estupefaciente conocido como “tusi”, cocaína rosa o polvo rosa. Esta sustancia era distribuida entre los clientes de las casas de prostitución por las propias víctimas de trata, quienes además eran obligadas a consumirla, lo que les generaba una fuerte dependencia que aprovechaban para doblegar su voluntad y tenerlas bajo su influencia y control, además de cobrarles las dosis, de manera que creaban un sistema de “economía circular”, según describe la Policía.

Tras un año de investigación, la operación ha culminado con la detención de 21 personas acusadas de los delitos de pertenencia a organización criminal, trata de seres humanos, relativos a la prostitución y tráfico de drogas, las cuales han pasado a disposición del Juzgado de Instrucción 3 de Algeciras, cuyo titular ha decretado prisión provisional para diez de los principales investigados.

Durante el operativo, desarrollado a finales de julio y que contó con la participación de más de cien agentes, se realizaron catorce entradas y registros en dichas localidades, en los que fueron liberadas veinte víctimas de trata.