Al aparecer en el lugar una patrulla de la Guardia Civil, la embarcación desde la que se estaba produciendo el alijo se dio a la fuga, quedando únicamente en la playa el conductor de un vehículo en el que se habían introducido los paquetes con el tabaco, que ocupaban todo el habitáculo, exceptuando el asiento del conductor.

Al tratar de darse a la fuga, intervino también en la zona un vehículo camuflado de la Guardia Civil que intervino con las luces prioritarias para impedir la fuga del vehículo.

Sin embargo, el conductor del mismo actuó de forma violenta, empotrando al coche camuflado en su intento de huida. 

Al quedar su vehículo inutilizado para continuar circulando, continuó la huida a pie, intentado escapar a nado por la playa, momento en el que fue detenido por los agentes actuantes.

Este nuevo episodio de agresión a la Guardia Civil se produce menos de una semana después de que dos agentes perdieran la vida en el puerto de Barbate (Cádiz), al ser arrollados por una narcolancha.