Según ha informado la Policía, la investigación comenzó el pasado día 21 de octubre, cuando observaron a dos individuos (conocidos por haber sido objeto de investigaciones relacionadas con el tráfico de drogas) que se encontraban repostando dos vehículos, figurando uno de ellos en las bases de datos policiales como sustraído. 

Realizando el seguimiento de los mismos, los agentes comprobaron como se dirigieron a la provincia de Sevilla desde la localidad de Algeciras.

Tras llegar a una ubicación cercana al municipio de Isla Mayor de la provincia sevillana y una vez realizada la carga de la sustancia estupefaciente en el vehículo sustraído, ambos vehículos regresaron a Algeciras. De este modo pudo detectarse cómo durante el trayecto, el vehículo que viajaba en primer lugar y unos minutos por delante del vehículo cargado con los fardos de hachís, realizaba funciones de lo que se conoce en el argot policial como “vehículo lanzadera”, cuya misión consiste en detectar la presencia de vehículos pertenecientes a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad y en su caso alertar al vehículo cargado para que pueda tomar rutas alternativas y evitar ser detectado.

Cuando los agentes dieron el alto policial a ambos vehículos en la ciudad de Algeciras es cuando pudieron comprobar cómo el conductor del vehículo sustraído ocultaba en el interior del mismo un total de once fardos de hachís tapados con lonas de color negro. Ambos detenidos fueron puestos a disposición del Juzgado de Instrucción número Cuatro de Algeciras en funciones de guardia la mañana del día 22 de octubre, decretando su ingreso en prisión.

La Policía destaca que, como consecuencia de la gran presión policial contra el narcotráfico que se materializa en todas las operaciones e incautaciones de sustancia estupefaciente llevadas a cabo por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad en los últimos años, es por lo que las organizaciones dedicadas al tráfico de drogas asentadas en el Campo de Gibraltar se han visto obligadas a desplazarse a otras provincias andaluzas como Huelva y Sevilla, donde se han establecido para continuar con su operativa delincuencial.