Imagen del asesino en la Plaza Alta
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El juez concluye la investigación de la muerte de Diego Valencia como "asesinato terrorista"

El juez concluye la investigación de la muerte de Diego Valencia como "asesinato terrorista"
El juez de la Audiencia Nacional Joaquín Gadea ha finalizado la investigación al autor confeso del ataque del pasado 25 de enero en Algeciras y ha confirmado su tesis de que hay indicios para afirmar que el crimen del sacristán Diego Valdivia debe considerarse como un "asesinato terrorista".
El magistrado considera que, "sin perjuicio de las alteraciones psíquicas" que el investigado, Yassine Kanjaa, "pudiera sufrir", los hechos podrían ser constitutivos de un delito de asesinato terrorista, castigado con la pena de prisión permanente revisable, así como de lesiones terroristas, penado con hasta 15 años de cárcel.

Así lo explica en el auto, contra el que cabe recurso, en el que pone fin a la investigación y transforma el procedimiento en sumario, en contra de lo que pretendía la defensa de Kanjaa, que siempre ha solicitado que se envíe la causa a los juzgados de Algeciras al rechazar que pueda encajar en un delito de terrorismo.

El ataque, perpetrado en dos iglesias de la localidad la tarde del 25 de enero, acabó con la vida del sacristán Diego Valdivia, asesinado con un machete, mientras que varias personas resultaron heridas, entre ellas un sacerdote.

Gadea lo califica en su auto de "ataque de naturaleza yihadista contra sacerdotes de la Iglesia Católica y musulmanes que no siguen las directrices de los preceptos salafistas encaminado a alterar gravemente la paz pública provocando un estado de terror en la población o parte de ella".

El único investigado, de 25 años y nacionalidad marroquí y actualmente internado en un hospital psiquiátrico penitenciario de manera preventiva, ha sido sometido durante estos meses a varios exámenes psiquiátricos.

Uno de ellos ha apuntado a que sufre un "cuadro psicótico que cursa con delirios de probable filiación esquizofrénica" y que en el momento de los hechos "presentaba una descompensación psicótica aguda con un importante grado de implicación afectiva y conductual que afectaría muy severamente a sus capacidades volitivas e intelectivas".

Circunstancias que, según el juez, "afectarían, de dictarse un pronunciamiento condenatorio, al alcance de la culpabilidad", pero no a la calificación del ataque como terrorista.

El magistrado de refuerzo del Juzgado Central de Instrucción número 6 repasa en su auto los hechos acontecidos aquel día y considera que el investigado, del que destaca sus publicaciones "de corte radical" en redes, "tenía premeditado el ataque mortal".

"Las continuas manifestaciones de su madre ante ese hecho que tanto le preocupa ('Yo tengo miedo por ti, por las cosas que me decías') y que Yassin le ha anunciado, no hacen más que revelar y corroborar la predisposición de este a cometer una acción ('Lo siento, estás en tu derecho. Lo siento y mucho. Es mi culpa, pero nuestro honor era todo para mí')"., explica el magistrado.

También ve "llamativo" el "nivel de religiosidad" que estaba adquiriendo el investigado en las semanas previas al ataque, como muestran las conversaciones que mantiene en la aplicación 'WhatsApp' con su madre.

El juez incluye un informe de inteligencia de Europol en el que relaciona el ataque con otras acciones terroristas perpetradas en Europa y que tenían como objetivos concretos templos o personas de religión cristiana.

Según el citado informe, las organizaciones terroristas como el Estado Islámico o Al Qaeda en cualquiera de sus filiales ha incluido sistemáticamente referencias a las comunidad y símbolos cristianos como objetivo, incitando a sus seguidores a atacar lugares de culto. 

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