Opinión

La perspectiva

La perspectiva
El Mirador se prepara para una recta final apasionante. FOTO: Pavón
El Mirador se prepara para una recta final apasionante. FOTO: Pavón
El Algeciras sólo ha perdido un partido de los últimos siete. El Viernes Santo puede dejar cerrada, de una vez por todas, la permanencia. Tengamos en cuenta los rivales y lo que se está disfrutando. La SAD está en camino y llega el momento de agilizar los plazos.

La Resaca llega en plena vorágine de Semana Santa y con una cita, además de las cofrades, para la pasión rojiblanca que, caprichos del calendario, tendrá lugar el Viernes Santo, en Palamós. Un partido de esos en los que ganar es una obligación y que se parece, bastante, al del Betis B. Aunque eso, de momento, está lejos.

El conjunto de Ania sigue enganchado a la pelea del sueño, que no obligación, de jugar el play-off de ascenso. “Me empieza a cansar escuchar tantas veces que el Algeciras es un equipo que está hecho para ascender”. Palabras del asturiano ante los comentarios de los últimos rivales que han visitado La Menacha. “Probablemente estemos entre los cinco presupuestos más bajos”, explicó.

En cualquier caso, la fiel parroquia algecirista sabe, en su mayoría,  la realidad y por ello está disfrutando de la aventura. Todo ello,  más allá de las críticas, aceptables, algunas poco entendibles, aunque siempre respetables.

Los datos son claros. Tres empates consecutivos en casa y cuatro partidos sin ganar. También se puede recordar que sólo hay una derrota en las últimas siete citas. La perspectiva siempre ayuda a analizar las cosas más allá del momento. Iván Turrillo y el míster tiraron de tópico pero en este caso real como la vida misma. "En agosto todos habríamos firmado esta situación". Amén.

El atasco en la zona de aspirantes, pero que también miran hacia el descenso, es brutal. La competición es apasionante y ahora, como cada temporada, aunque con rivales de mucha más entidad, todo cuesta un mundo. Baleares y Albacete no han ganado en La Menacha y el actual líder estuvo muy cerca de perder. Por ello lo de la perspectiva. No vamos a recordar lo de siempre, el pasado reciente, pero parece que alguno se olvida pronto.

Canario, en el campo, me decía que la afición era brutal”. Confesión del capi tras las tablas ante los baleares. Claro que también dijo “esto no es Tercera cuando nosotros teníamos plantillas mejores que los rivales y la obligación era ganar”. Lo dicho, perspectiva, exigencia y valor a lo que se está consiguiendo.

La permanencia está costando más de lo debido. Con 45 puntos es increíble que aún sigamos con cierto peligro, más histórico que real, pero con la sensación que cualquiera, incluyendo al Costa Brava, te hace un roto. Un punto, ahora, puede parecer poco. Sin embargo, cuando acaba la jornada y se ven los resultados, casi acabas celebrándolo como un ascenso, entiéndase la exageración.

Innecesario

Y luego está lo de la SAD. Una vez que acaben los días de pasión, llegará el momento de dar el paso definitivo. No estaría de más, cada uno es libre  de hacer lo que le parezca, pero teniendo clara la situación. Alargar el trámite es un poco absurdo  Es tan real que 254 que tenemos derecho a comprar, como que, salvo sorpresa, no vamos a hacerlo. Renunciemos cuanto antes a ese trámite. Sin ir más lejos, el próximo domingo 24 de abril, cuando acudamos, en masa como está siendo habitual, al partido ante el UCAM. Para eso el club tendría que tener todo dispuesto en la tienda o en las oficinas e ir acelerando el proceso.

Lo siguiente es desear que Félix Sancho, de momento poco que reprochar, siga por ese camino emprendido que redunde en beneficios para él y para nuestra entidad.

La perspectiva que da el tiempo, tanto el pasado, presente como futuro, servirá para poner en valor lo que la entidad está consiguiendo desde que se subió al carro de la Primera RFEF y el presidente, Nicolás Andión, Nacho Castro, Miguel Ángel García y demás, impregnaron del veneno rojiblanco a un empresario de Burgos, ambicioso como pocos, pero que sabe que todo lleva un proceso. 

Las prisas por subir de Tercera a Segunda B eran necesarias, lógicas y entendibles. Ascender a Primera RFEF en plena pandemia y con la caja vacía, soñar en Almendralejo con la Segunda A, y vivir lo de esta temporada, es cuestión de analizarlo fríamente, si es que nuestra pasión nos deja.

Soñar, por supuesto, exigir lo que corresponde a otros es bonito y no está de más, pero pongamos las cosas en perspectiva. Somos el Algeciras, esto nunca va a morir, pero no caigamos en precipitaciones. Celebremos la permanencia, ojalá se cierre el Viernes Santo y luego imaginar la gloria no cuesta nada, pero sin frustración sino llega. Siempre Shiraaa