Querido Colegio, a falta de muy pocas semanas para el final, no he querido irme sin deciros todo lo que tengo guardado, esta carta no la escribe en exclusiva una madre, la escribe una familia entera, una familia que ha visto crecer y aprender a su hija mayor de una forma divertida, llena de ilusión e impecable.

Me consta, porque lo he vivido en primera persona que os dejáis la piel con todas sus capas y que os involucráis con cada uno de nuestros niños de una forma que nada más a simple vista se comprueba que es satisfactorio tanto para vosotros como para nosotros los padres. Es una pena que tanto trabajo, tanta alegría y tanta ilusión que le ponéis a cada uno de los días que dura el curso se resuma en una pregunta: ¿y después que viene?

Pues papás y mamás,…. después viene….. lo que tenga que venir. Personalmente me dediqué los dos primeros años y parte del último a preocuparme por el “después” aún viendo y sabiendo cien por cien que mi hija adoraba su cole, adoraba a su seño, y disfrutaba con todas y cada una de las cosas que hacía, pero la preocupación de una madre siempre va más allá.

Me indigna que el “después” os machaque el mes de marzo de la forma que lo hace y me indigna porque no he visto un colegio tan entregado como el vuestro, tan lleno de tanta ilusión y de personas tan maravillosas en sus aulas y fuera de ellas, desde la amabilidad de Juan, la sonrisa tan característica siempre de Elo, el enorme cariño de Noli, María José,  Lale, Pepi y Sandra y su incondicional entrega, la diversión de Ana, y la preocupación y entrega a pie de cañón todos los días de Alicia y sobretodo sus numerosos “buenos días” cada mañana, con nombre y apellido, tantos….. como alumnos hay en su colegio.

Y por supuesto, no puedo irme sin decirte nada a ti, Eli, que según mi hija eres “su mamá en el cole”,  y esas palabras son las mejores que puede escuchar una madre de un hijo referente a su seño, porque significa que se siente querida, protegida y cuidada, no hay palabras para ti porque todo lo que te diría me sabe a poco, ¡Gracias, gracias, gracias! Porque ese no es solo tu trabajo, eres tú entregada a cada uno de esos 25 niños, es un verano ideando planes para septiembre en tu casa, es unas vacaciones sin dejar de saber cómo están tus niños, eres eso… una Gran Mamá de 25 niños y que ha tenido y tiene para todos y yo sólo puedo decirte lo agradecida que estoy con la vida por haberte puesto en su camino.

Hago aquí un llamamiento a todos esos padres que hoy se preocupan por el “después”, y os digo que disfrutéis, que os dejéis llevar, que participéis en todo lo que podáis, que compartáis momentos con personas estupendas porque de toda situación se aprende algo y que simplemente os sentéis a observar a la salida del colegio como salen esos niños, con ese brillo en los ojos, con esa sonrisa en la cara que revela que no salen de un colegio más, salen de su segunda casa , y os sintáis siempre orgullosos y satisfechos de formar parte de esta gran familia porque no hay otra igual, aquí los niños aprenden muchas cosas de las que vienen en los libros, pero en esta gran familia les enseñan otra incluso más importante, les enseñan a soñar, a imaginar y a realizar.
Tras estos tres años he logrado entender porque vuestro emblema es un arbolito con esa cara tan feliz, sea cual sea la razón, para mi es clara, le dedicáis tanto cariño y tanto entusiasmo a regar a esos arbolitos que os llegan tan pequeños y nos los devolvéis con unas raíces y una base tan sólida y llena de tanta luz que están preparados para sembrar los en cualquier sitio y van cargados de sueños e ilusiones y sobretodo cargados de ganas, de muchas ganas para seguir creciendo.

Espero,  y sé que muchas madres opinan cómo yo, que sigáis teniendo largos años para poder seguir disfrutando de vuestro desempeño y para poder seguir formando a esos niños de esa forma tan especial que tenéis porque de otra forma se perderían más de 25 años de historia de un colegio de Algeciras, y no de un colegio cualquiera, sino del vuestro, uno de los colegios con más encanto y saber hacer, un colegio por el que antes se peleaba y no es justo pagar los platos rotos de otro, y todo por una pésima organización y un….. a saber que otros motivos tengan para ello.

Aquí mi reivindicación por vosotros y por vuestro impecable labor como docentes.

Esperanza Piñer Moreno