Las bujías de encendido son unas piezas de metal que disponen en la punta de un elemento calefactor. Dichas piezas generan una corriente eléctrica que produce una gran cantidad de calor que se dirige hacia el bloque del motor alrededor de los cilindros. Este fenómeno es el que facilita el arranque de los motores diésel, al evitar que los cilindros absorban el calor de la comprensión, lo cual impide la combustión.

Los elementos que componen una bujía de precalentamiento son el lápiz o electrodo, el cuerpo cerámico y el borne de conexión.

La temperatura que alcanza la bujía puede llegar a ser de varios miles de grados kelvin, lo cual hace posible una combustión instantánea de la mezcla de aire y combustible.

La duración de la bujía dependerá del material del que esté hecho el electrodo central. Así, las de cobre duran entre 15.000 y 20.000 kilómetros; las de níquel y las de plata, hasta los 30.000 kilómetros; las de platino, hasta 100.000 kilómetros; y las de iridio, que pueden funcionar entre 60.000 y 120.000 kilómetros.

También varías según su grado térmico. Así, las bujías calientes son las que tienen la punta del aislador muy larga, y el recorrido del calor no es directo, por lo que evacua poco calor de la cámara de combustión hacia la culata. Las bujías calientes conducen el calor con lentitud y se mantienen calientes. Por su parte, las bujías frías tienen la punta del aislador corta, y el recorrido del calor es muy directo, por lo que evacua mucho calor de la cámara de combustión a la culata. Las bujías frías conducen el calor con rapidez y se mantienen más frías.

Además, estos productos pueden tener diferentes diseños y cantidad de electrodos. 

Cómo cambiarlas

Como sucede con todas las piezas, las bujías de precalentamiento tienen una vida útil, después de la cual es preciso cambiarlas. Usted podrá hacerlo en un taller aunque, siguiendo una serie de pasos sencillos, podrá hacerlo también usted mismo en casa.

Uno de los indicadores orientativos para el cambio de bujía es el kilometraje de nuestro coche, ya que normalmente se debe acometer esta operación al llegar a los 120.000 kilómetros.

No obstante, el motor diésel de nuestro coche va a ser el que mejor nos informe de cuándo hay que cambiar las bujías, ya que habrá que hacerlo cuando el arranque del vehículo empiece a funcionar mal. Este es el momento de cambiar la bujía de precalentamiento, ya que, si no lo hacemos, podemos llegar a provocar un daño mayor en el motor.

Además, debemos tener presente que, en el caso de que una bujía no funcione adecuadamente, habrá que hacer el cambio de todas las bujías a la vez.

Los pasos para hacer nosotros mismos el cambio son los siguientes:

1. Desconecte la carga eléctrica de la batería del coche para evitar sufrir ninguna descarga.

2. Localice las bujías de precalentamiento, que suelen estar ubicadas en un lateral del bloque del motor. Hay ocasiones, en las que es preciso quitar alguna canalización.

3. Desconecte el cable de alimentación de las bujías, desenrosque y retírelas con cuidado.

4. Introducimos las nuevas bujías en la zona de rosca y apretamos adecuadamente con una llave de bujías.

5. Montamos de nuevo las conexiones que hemos tenido que quitar para realizar el cambio.

Fuentes:

https://www.autodoc.es/repuestos/bujia-de-encendido-10251
https://www.pruebaderuta.com/guia-para-cambiar-la-bujia-de-precalentamiento.php