Landaluce acusa a la oposición de volver a usar la táctica del miedo hacia los trabajadores municipales
20 de octubre de 2013 (17:43 h.)
La táctica del miedo, que cada cierto tiempo esgrimen los partidos de la oposición cuando gobierna el Partido Popular, vuelve a salir a la palestra con la Reforma de la Administración Local que se tramita en el Congreso de los Diputados y el Senado, y que una vez aprobada va a propiciar una mejor financiación local, así como la eliminación de las duplicidades.
Eso es al menos la intención del Gobierno Central, y que responde a una demanda ciudadana que permita el adelgazamiento de una administración, que gracias a la otra administración, a la paralela, ha engordado la nómina hasta unas cifras ciertamente alarmantes, como lo demuestra el abultado gasto público.
El alcalde de Algeciras, José Ignacio Landaluce, ha sido tajante al garantizar que la reforma de la administración local aprobada por el Gobierno no va a afectar de ninguna de las maneras ni a los servicios que se prestan desde el Consistorio, ni mucho menos a ninguno de sus trabajadores, cuyos puestos están asegurados.
Con estas declaraciones, Landaluce ha querido zanjar de una vez por todas, el falso debate iniciado por los partidos de la oposición sobre esta reforma recurriendo a la táctica de intentar asustar a los trabajadores con eslóganes, algo que ya intentaron en la pasada campaña electoral y que no les sirvió para nada.
Como se recordará, PSOE e IU, utilizaron a los trabajadores de la limpieza pública de Algeciras para advertirles que la llegada del Partido Popular a la alcaldía supondría la privatización de la empresa y un riesgo para sus puestos de trabajo, algo que no solo no ha ocurrido, sino que el propio equipo de gobierno ha rescatado servicios en manos privadas, como la limpieza de colegios y cementerios, garantizando la estabilidad de la propia gestión pública de Algesa, y desmontando el argumento asustadizo de la oposición local.
Esta misma semana, los ayuntamientos gobernados por el PSOE en la Comarca, concretamente San Roque y La Línea, han realizado protestas con escaso seguimiento, a las puertas de sus respectivos consistorios.
Landaluce ha asegurado que la Ley de reforma de la Administración Local, garantiza la viabilidad de los ayuntamientos y hace que éstos puedan desarrollar las políticas sociales, además de clarificar cuáles son las competencias propias que tienen los consistorios y los protege frente a las competencias impropias que han venido asumiendo durante años porque otros no las hacían. En este sentido, añadió que a partir de ahí, los ayuntamientos podrán ser objeto de delegación de esas competencias, pero si son objeto de esa delegación tiene que haber un blindaje, porque van a recibir la financiación suficiente.