Una gran parte los restos retirados, aproximadamente un 50%, ha sido trasladada para su reciclaje. Y es que para el Consorcio era prioritaria que esta actuación se enmarcara además en criterios de sostenibilidad y por ello acordó con la empresa adjudicataria retrasar el comienzo de la recogida a septiembre, ya que de esta forma se podría aumentar el reciclaje de los restos como así ha sido finalmente, pudiendo incluso duplicarse la cantidad, hasta alcanzar casi un 50% del total frente al 20% inicial que daba cumplimiento a la reglamentación vigente de aplicación, la Ley 7/2022 de 8 de abril de Residuos y Suelos Contaminantes para una Economía Circular.

De hecho, FCC Ámbito ha destinado más de 500 toneladas de residuos a reciclaje, regeneración o valorización energética, con lo que Zona Franca se reafirma en su compromiso medioambiental en sintonía con su apuesta por un modelo de gestión más sostenible.

Hay que recordar que, una vez detectado el vertido, la Zona Franca de Cádiz activó desde el primer momento todos los procedimientos necesarios para acometer su retirada a la mayor celeridad, por su condición de propietaria de los terrenos –y perjudicada–, siempre cumpliendo los plazos establecidos por la Ley de Contratación del Sector Público y trabajando en paralelo y en coordinación con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado que investigan la autoría de los hechos.

En paralelo y con el objetivo de controlar los accesos no autorizados en la parcela y tratar de impedir que se vuelvan a depositar residuos indebidos, la Zona Franca ha instalado dos cerramientos en la parcela con puertas metálicas dobles abatibles de 5 metros en total y mantuvo un servicio de vigilancia 24 horas con seguridad privada hasta el inicio de los trabajos.