¿Qué tiene el póker online para que cada vez atraiga a más jóvenes y no tan jóvenes en todo el mundo? ¿Por qué parece que ahora todo el mundo juega a póker? Puede ser que, pese a los prejuicios que todavía existen hacia el juego en general, resulte que el póker tenga sus ventajas como alternativa de ocio. Podemos afirmar sin temor a equivocarnos que estamos en la era plenamente dominada por Internet. Esto no solo sucede en lo que a cuestiones laborales o de información se refiere, también es el centro neurálgico del ocio. Las relaciones personales y afectivas de una gran mayoría de la población giran alrededor de las redes sociales. La tecnología se ha ido adaptando cada vez más a todo tipo de individuos y hoy en día niños y abuelos son usuarios activos de Facebook o Twitter, por mucho que los primeros teóricamente deberían permanecer al margen. Pese a las connotaciones negativas de esta tendencia hay aspectos que tienen un innegable lado provechoso. La oferta de ocio ha crecido de forma sustancial y la tecnología permite a la población aprovechar hasta los más cortos periodos de sosiego para despejar su mente con cualquier entretenimiento, y si no que le pregunten a los fans del famoso Candy Crush. De alguna manera esto puede ser una buena opción para poblaciones pequeñas a las que, debido justamente a su densidad, no llegan todas las actividades que sus habitantes desearían. Hoy en día Internet mitiga en cierto modo esa carencia llevando hasta los hogares una propuesta de entretenimiento que de otro modo sería imposible. De entre todas estas posibilidades hay una que curiosamente en los últimos tiempos está seduciendo a multitud de personas en todo el mundo, se trata del póker online. Ignoro si esta tendencia está muy influenciada por los anuncios masivos de póker y apuestas con los que las cadenas de televisión nos bombardean en las madrugadas, o si sencillamente el mundo ha descubierto ahora las excelencias de la baraja inglesa. Hay que reconocer que el póker, que en nuestro país siempre ha jugado un papel discretito, actualmente nos agasaja con retransmisiones de los grandes torneos en TV, eso sí, en horarios intempestivos y a veces con meses de retraso. Pero incluso a veces nos desayunamos con la noticia en la prensa deportiva de que un español casi imberbe se ha anotado un extraordinario triunfo en un gran evento de póker y se ha llevado a su casa un millón de euros como si nada. Es difícil saber si esta repentina afición por el póker online es sencillamente una moda o si muchos jóvenes de ciudades con recursos limitados de ocio ven en ella una forma de divertirse y por qué no, averiguar si tienen talento para ello y convertirlo en una fuente de ingresos en una época en la que no abundan las oportunidades. De cualquier modo las salas de póker online no han dejado pasar esta oportunidad de crecer en usuarios y se están entregando a fondo para ofrecer un servicio profesional y a través de cualquier dispositivo con una conexión a Internet para comodidad de su clientela. Uno de los mayores atractivos que ofrecen las salas de póker contiene la palabra mágica: gratis. Los nuevos jugadores tienen la oportunidad de utilizar dinero ficticio para jugar de idéntico modo de quien lo hace a nivel profesional. Sin duda una buena estrategia para popularizar esta actividad. Quizás este juego online no llegue nunca a ofrecer esos momentos de adrenalina de una competición en vivo pero sin duda está formando una legión de seguidores en todo el mundo. Así es como suceden las cosas en Internet y a buen seguro que seguiremos viviendo otras revoluciones a través de la Red que traerán cambios más radicales que éste a nuestro modo de vida.