Más de 35 millones de personas convocadas a votar. Dos urnas para dos cámaras; la primera el Congreso, formado este por 350 miembros y la segunda el Senado, en este caso 208 senadores son los que conforman su total.

El PP ha sido el partido más votado en 13 de las 17 comunidades autónomas. El PSOE registra el peor resultado de su historia, pero se mantiene como segunda fuerza. Podemos se queda con un tercer puesto en el Congreso.

Entretanto permanece en rigor en España una extraña ley electoral que si me atrevo, apuesto a que 7 de cada 10 personas no la entienden. Suceden contactos y encuentros pero con muy pocas probabilidades de llegar a un acuerdo.

Y mientras todo esto sucede el número de desempleados baja en 354.203 personas en 2.015. Con estos datos el paro se queda en 4.093.508 personas en el país; una cifra todavía demasiado elevada y que cuenta entre muchas otras cosas que quedan por arreglar. Pero continúan los contactos, los encuentros y las pocas probabilidades y quién sabe si también las pocas ganas de llegar a un acuerdo. El gobierno del país continúa estancado aproximadamente 47 millones de personas permanecemos a la espera de ver qué sucede (y vuelvo a insistir) por culpa de una extraña ley electoral que si me atrevo, apuesto a que casi nadie entiende.

¿Y todavía hay quien dice que no se debe reformar esa ley?