Opinión

Un Papa

Un Papa

He visto en ocasiones como algunas mujeres entraban en nuestros templos y se desnudaban de cuerpo para arriba, habiéndose pintado en los senos no sé qué reivindicaciones

De un lado he visto una mujer que se hacía llamar a ella misma “poetisa”, de la cual desconozco su carrera para saber si dicho título es o no cierto, aunque eso es algo que me sobra pues he visto como ha actuado. Y para ser poetisa antes de nada hay que saber ser persona y saber respetar. La he visto blasfemar en contra de una creencia, la mía propia y la de muchos otros, haciendo de uno de los mayores estandartes de nuestra fe, la principal de nuestras oraciones, “el padrenuestro”, una burda parodia. Y he visto como otros la aplaudían o incluso, vete tú a saber, le reían las gracias por atreverse a mentar una “matre nostra”; tal vez sin saber que nosotros en nuestra fe también contamos con una madre, que es la Madre de todos y a la cual saludamos de la siguiente manera: “Ave María”.

He visto en ocasiones como algunas mujeres entraban en nuestros templos y se desnudaban de cuerpo para arriba, habiéndose pintado en los senos no sé qué reivindicaciones. Estas han invadido nuestro espacio de oración, para estar en comunión con nuestra fe, nuestros hermanos y el mundo entero. He visto como se mofaban de tradiciones tan nuestras como los “reyes magos”.

Un poco apartado de la fe religiosa y teniendo que ver más con lo político, los he visto emplear palabras que hacían referencia directa al terrorismo, removiendo las entrañas a quienes sufrieron el dolor de haber sido tocados de una forma u otra, por esa sanguinaria palabra.

Y he visto gente y partidos políticos que no hacían nada al respeto; mientras del otro lado he visto y veo en ocasiones un hombre, que sigue abogando al perdón, a la tolerancia y al respeto de los credos. Veo un Papa que ora por la comunión de todas las personas mientras se empeñan en hacernos daño, en crear crispación y furia.