Cultura

Una banda sonora que abre todas las ventanas

Una banda sonora que abre todas las ventanas

Algeciras se ha echado unos vecinos ejemplares. Unos nuevos inquilinos de la música, de la cultura y de la poesía que le han puesto su singular banda sonora a un vecindario, el algecireño, que ya empieza a abrir las ventanas sorprendido por la frescura y el dardo literario de este nuevo grupo.

Y anoche, en el marco incomparable del festival literario Calenduleando, en el parque María Cristina, se asomaron a su rellano con sus instrumentos y su buen rollo para presentar sus credenciales en la ciudad. 

Credenciales que pasan por la aportación de cada uno de sus componentes. Y es que se trata de la voz y las letras de uno de los mayores talentos poéticos de las nuevas generaciones algecireñas, Stewart Mundini; de la mano de la sensibilidad creadora en la música y en la guitarra de Pepelu Grima; junto a viejos rockeros de la escena algecireña, como Chete Cavas en el bajo o Antonio Joaquín Sánchez a la batería. Junto a ellos, la trompeta y los coros de Joaquín Arroyo terminan de darle forma al sonido de estos vecinos, que ayer contaron con la visita en el bloque de otro talento brillantísimo de la ciudad, como es la gran María de Grandy en el violín.

El resultado fue el que se disfrutó en la magnífica tarde-noche de ayer en el parque. Un puchero musical que llevaba avíos de blues, de balada, de Rock'n'Roll y hasta de zamba argentina. Una música que transmitía su frescura por momentos, su hondura en otros y su atmósfera canalla y bohemia en otros.

En sus creaciones, los algecireños ofrecen el compendio que supone musicalizar los poemas de Mundini, todo un lujo para un repertorio que deja sus dardos afinados en el alma de los espectadores.

La de ayer fue toda una declaración de intenciones. Y un aviso a la ciudad. No habrá cabida para el silencio mientras sigamos teniendo a estos vecinos tan ejemplares.

El objetivo siempre certero de Tomoyuki Hotta estuvo allí para inmortalizarles.