Mi nuevo amor
Tus palabras tristeza me causan,
al saber que es por tu culpa,
quizás aceptes mis quejas.
Junto a ti,
desde mostrar inocencia
hasta ver en mí a quien amar,
desde mostrar enfado y rabia
hasta mimar,
con tu mirada todo ello tú me das.
Y junto a la alegría que despacio te lleva,
te digo ahora;
mi corazón anhela tus anhelos,
desea tus deseos,
tanto que yo por ti
si hiciera falta
mi vida desafío.
Ya en la mañana me miras sonriendo y me preguntas
¿Has descansado?
Ahora te respondo ¿y tú, has descansado?
Porque en la noche te he vigilado,
estrella errante que con mi mirada he querido cercar.
Ya sabes que tú eres pasto del fuego mis sentimientos,
y me preguntas ¿Has descansado?.
Ya un momento agradable,
sabes que ese momento en que el café
se convierte en testigo mudo de una complicidad
ciega entre tú y yo.
Poco a poco se forja el cariño que sientes por mí,
quien te escribe,
tus ojos son mi salvación, y tu cuerpo....
Por poco que cueste el afecto, el tuyo valdría mi vida plena
con tus mimos, tus besos.
Es decir, te quiero, hacer de lo cierto esperanza de correspondencia,
es esperar tu cuerpo, lo más sublime, cielo, delicia humana.
¿Por un beso tuyo...? El paraíso una vez más.